Plática con los obreros de La Gran Carpa Catedral

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Rev. José Benjamín Pérez
Lunes, 30 de enero de 2023
Cayey, Puerto Rico

Siempre él decía que era a lo que… Es como decir, tú vas a un restaurante y tú sabes que te vas a sentar y pides la comida y vas a comer; pero la logística de cómo tú llegar…: tú tienes que montarte a un carro… tienes que vestirte en la casa, tienes que montarte a un carro, tienes que dar la vuelta para pararse y abrir la puerta. ¿Ve? Sentarte, pedir la orden y todo. La logística de eso, en el camino tú la acoplas; la finalidad es comer.

La finalidad de la Visión de la Carpa es todo lo que va a estar ocurriendo. Lo que vaya a ocurrir en el proceso para que llegue a eso, en el camino uno va desenvolviéndose. Por eso él me decía:

— [WSS] “Cuando vayas viendo… (¿Ve?) Por la conveniencia que te vaya llevando acá a ese momento, vas a ir realizando las cosas”.

No va a ser porque: “No, tiene que ser así. Cuando llegue ese momento, pues llegó”.

Antes de eso tiene que haber un proceso, de…, por ejemplo: la lona estirada, del cerco de lona: pues ahí: a) alguien tiene que comprarla; b) el tubo que se va a poner ahí…

Ahí no te dice: c) tienes que usar expansiones “tal” para poner la base del tubo.

¡Se vio una lona estirada!, pero lo que conllevó a poner la lona es asunto nuestro. No sé si me siguen, ¿me explico?

[Trabajador: Todo tiene un principio]. ¡Sí, claro!

Entonces, es como aquí, que Santa cuando (yo siempre lo he dicho) – ella vino un día y yo le enseñé, le mostré todo, y ella le dijo: “William, ¡eso es bien grande ahí!”. ¿Ve? Y él le dijo: [WSS] “Todo eso se le va a llenar”. Entonces, si “todo eso se le va a llenar”, tienes que hacer provisiones de más cosas. ¡Pues vamos a hacer provisión de más cosas!

Todos los procesos para llegar a ese cumplimiento son procesos que van a hacer que se cumpla eso al final.

Por ejemplo: la puertita del cerco, que se hizo ahí en el medio; él dijo:

— [WSS] “No; me vas a hacer las puertas en las esquinas”.
— [JBP] “Ah perfecto, hermano William; pero mira, hermano William, no es que esté diciendo que…; pero es tan lejos la distancia, que, para los del sonido (le estoy diciendo) hacer un portoncito ahí, incluso para uno pasar para el púlpito”, le decía yo.

Me dijo:

— [WSS] “¿Si ves? Ya eso es por conveniencia: que te conviene poner una puertita ahí. Ponla”.

Y ¿qué me estaba mostrando? Que tú en el camino… No es que el hermano Branham haya visto una puerta en el medio. A lo mejor lo pudo haber dicho; pero no era algo que era necesario decirlo. Dijo las más importantes: [WMB] “Hay una puerta de cerco en la esquina”.

La del medio, eso corresponde a los que estaban ahí en la logística; que era a nosotros que nos conviene esa puertita ahí; y no tenemos que caminar hasta allá abajo; para no estar tampoco… porque ¡capaz que alguien venga y brinque el cerco! ¿Entiendes? Que la brinque para no tener que dar la vuelta (¡que son capaces!).

Pero entonces, ¿por qué se puso la puertita? Por conveniencia de nosotros mismos. ¿Ve?, que en el camino se va dando, se va viendo, la necesidad.

Y como todo esto, si no se hace ahora…, ¡no va a esperar uno el momento que llegue para…! [T: Es tarde, sería tarde entonces]. Sí. Pero todo hay que hacerlo; porque si se va a llenar… si se va a llenar es porque va a haber necesidad, va a haber mucha necesidad.

Cuando ellos hablan, siempre… lo que hablen en el tiempo en que están viviendo (los Enviados de Dios), siempre tiene cumplimiento en los dos aspectos: en lo espiritual y en lo físico; porque esa dimensión cuando es hablada… como es hablada: viene a ser el repetidor de lo que ya fue visto allá. Y al hablarse acá —como es Palabra hablada— tiene que cumplirse. No puede caer en tierra esa Palabra. De alguna forma tiene que cumplirse.

Y por eso es que Él decía que: “Yo no hago nada sin que vea primero al Padre hacerlo”1, y ahí es que obraba.

Y otra, el hermano Branham también hacía eso: el Ángel le mostraba, y él hacía exactamente lo que el Ángel le decía que hacía; y el Ángel entonces lo cumplía.

Y así va a ocurrir en ese tiempo de la Visión de la Carpa, en Su cumplimiento pleno: es Dios ahí el que va a estar obrando; y como Él le muestre, así mismo es que se va a hacer.

Ahora lo que le está mostrando es la Palabra revelada; por eso es que tú ves que todas las Escrituras toman lugar y caen tan encajadamente tan bien; porque es Él.

No somos nosotros. Es Él. Y uno ve la Mano de Él en todo; cómo las Escrituras se van poniendo en línea.

¡Y cuando de momento se abre el cuadro ahí de…!, algo que estaba oculto.

Por eso yo ayer les decía: “Puedes estar 40 años, 50 años, escuchando los mensajes, y no te va a dar la Fe de Rapto”.

—“Pero ¡cómo va a ser?, ¡está diciendo usted algo ahí… fuerte! (vamos a decir)”.

Es que así es. Puedes estar 60 años escuchando lo mismo: Si no tienes esta parte final, no va a producir la Fe de Rapto. No va a llegar.

Los mismos que allí dijeron…, que estaban en el tiempo de Jesús (creían lo mismo), decían2:

—“Nuestro padre Abraham y… ¡Nosotros creemos a Moisés!… Comieron del maná del desierto”.
—“Y todos murieron”3.

¿De qué le valió?, si no estaba recibiendo ahí el cumplimento de lo que él profetizó, de lo que él habló…, que era la Venida de Uno que se levantaría en medio del pueblo hebreo. “Profeta como yo levantará el Señor”4. Y estaba allí la Palabra cumpliéndose y no la veían.

El que está ciego, ¡no hay forma!

Entonces, cuando se une, se une la mayoría de las veces a otro ciego. Por eso dice: “Si un ciego guía a otro ciego, ambos caen en el hoyo”5. Es por eso: porque no se unen al que está viendo. Si se unieran al que está viendo, pues ahí van a ver rápido el Programa.

• Hay una parte que estaba viendo anoche, un extracto del 2004, de la vida de José, el esposo de María; y eso podemos esta semana abundar; porque José… en diferentes ángulos…

Yo hablé algo de los 45 años que tenía José6 cuando…

Pero, por otro lado, ahí en ese extracto el hermano William dice que José no estuvo en el ministerio de Jesús; después de los 12 años no aparece.

Aparece hasta los 12 años, cuando dice: “Tu padre y yo te estuvimos buscando”7; después no se menciona más.

Y él dice que en el ministerio de Jesús ni en los apóstoles después más adelante, ni el Día de Pentecostés, aparece la palabra “José”. O sea que José, ahí él dice que pertenece al Antiguo Testamento. Y él dice ahí: [WSS] “Podemos hablar más adelante, porque hay muuuchos… hay un tesoro grande ahí”, dice él.

Pero otro ángulo que hay ahí: Que José, al no estar presente en el ministerio ya de lleno de Jesús, y pertenecer a la Dispensación de la Ley… porque si es del Antiguo Testamento, ahí era la Ley; no pertenecía a la Gracia como Lázaro, que Lázaro murió pero resucitó, y vino a formar parte entonces del Cuerpo Místico.

Así también el hermano William no estuvo presente en su cuerpo físico en el ministerio de ahora; por ende, en su cuerpo físico pertenece a la Dispensación de la Gracia, no a la Dispensación del Reino.

Y Gabriel, donde le apareció a la virgen María y al sacerdote Zacarías fue en la Dispensación de la Ley; y el que aparece en la Dispensación del Reino es Miguel.

¿Ven que hay algo ahí grande?

Cuando se empiece… Voy a buscarlo, ahora voy derechito a empezar a buscar de eso, porque hay algo ahí…

Porque están los dos Arcángeles, que representan: uno al Antiguo Testamento y otro el Nuevo. Igual los ministerios de Moisés y Elías, lo mismo. Igual la Novia con el pueblo hebreo. ¿Ve? Todo es dual siempre. La Bendición de la Primogenitura: doble. Todo es…

Y cómo él, siendo el padre adoptivo de Jesús… porque no era su hijo. Igual William no era mi padre, pero en la parte espiritual vengo a ser un hijo adoptado.

Una vez me dijo Alta Gracia (la hermana de Chaparro) que el hermano William había dicho (ella dice que fue un mensaje, pero lo he buscado y no…): que el hermano William no me llamaba “hijo” porque Humberto estaba vivo, pero que una vez que Humberto partiera, ahí me llamaría “hijo”.

Y eso, como esto de ahora también, de lo de José, ¡algo hay ahí! que también se…

Ese es otro ángulo: la vida de José, qué representa. Porque puede representar muchas cosas. Representa a ese que estuvo ahí al final con la presencia de Gabriel… ¡y yo tenía 45 años cuando eso! También puede representar esa parte de él como padre, y no estar en el ministerio de ahora. ¿Ve? Hay diferentes ángulos.

• ¿Viste ayer?, en un extracto, que él dice que [WSS] Elías les presentará, o los llevará al Mesías8. Porque “el Mesías” es una persona ungida con el Espíritu de Dios; lo que pasa es que la gente se… tropiezan con eso, quizás.

Pero él siempre me decía: [WSS] “Benjie, diles, explícales, que el Mesías es una persona ungida”. Y cuando él decía que se iban a cumplir en él las cosas, o hablaba indirectamente y se veía como que era él… Al igual como el hermano Branham: hablaba que… y uno pensaba que era él.

Y era el que estaba por dentro de él: el que hablaba. Si se iba ese velo de carne, pues seguía por el… Era el que estaba hablando dentro de él. Ese es eterno.

[Trabajador: Lo mismo que: había dicho Elías, y lo vino a cumplir Eliseo].

Lo mismo, todo es paralelo. Lo que pasa es que ahora fue la manifestación tan grande de ese Arcángel en medio nuestro, en una forma sencilla también, que todo el mundo pensó que era en él.

Claro, si no, se hubiese levantado un montón, diciendo: “Pues si este no es, pues yo soy. Aquel piensa que yo tengo más… Pues yo soy, y seré yo”. Y empiezan a desviar la vista. Lo mismo que pasó con el hermano Branham: se puso a mostrar la Primera Etapa y Segunda, y los pastores en vez de enfocar el pueblo a él: “No, pues yo también. Yo puedo hacerlo”. Y desviaron la atención del pueblo.

Pero ahora él todo lo enfocó en él, para que todo el mundo se enfocara en él.

Y ahora, cuando sale lo que él ya había hablado que iba a cumplirse, nadie puede venir a decir: “Yo…”. Se trancan. Entonces lo que van a hacer es: “No, eso no puede ser”. Y entonces combaten.

Lo verdadero, lo que es realidad, que está es el cumplimiento de lo que él habló por años; mira si lo guardó tanto que…; si hay un hombre tan hermético es el hermano William.

Bueno, es que el que estaba con él: [WMB] “De esto no vas a decir nada a nadie”, le dijo el Ángel; lo regañó fuerte: [WMB] “Lo que te dije que no hicieras, eso hiciste”. Y le habló (pero con amor dice que le habló) fuerte. [WMB] “De esto no vas a decir nada”.

Por eso él dijo: [WMB] “Lo que me dijo allí, tendré que guardarlo conmigo”.

O sea, mira, si tú ves, cuando él le dice: [WMB] “Lo que me dijo allí…”. ¿Qué te da a entender eso? Que hubo una conversación allí con alguien; algo estuvo hablando allí, porque dice: “Lo que me dijo allí, tendré…”.

Ahí hay cosas que se van a estar moviendo, y ahí es donde… Toda esta preparación, después no pueden decir: “A mí nadie me dijo nada”; porque va a pasar lo mismo que pasó con los hijos de Aarón: metiéndose al lugar santísimo con fuego extraño9.

Y eso de “fuego extraño”, hay tantas cosas que representan lo que es un fuego extraño: desde mentiras, desde odio, desde celos, desde contienda, desde… todo eso es fuego extraño. Y va a llegar un momento en que va a estar obrando Dios de cierta manera, que puede haber personas que caigan muertas entonces.

Porque lo mismo pasó…, y ese testimonio voy a grabárselo a Tirzo. Estuvimos en Guatemala y el hermano William no pasaba; y Miguel hacía…, tú sabes que él decía: “¡William! ¡William!” en ese tiempo, ¿te acuerdas? Y aplaudían, porque no había cántico; y… O fue cuando estaba “Despierta ya”. Uno de esos dos eventos. Y el hermano Miguel mandó a Tirzo a que fuera, a ver si era que él se había quedado dormido; y Tirzo abrió la puerta. Y él le dijo: [WSS] “Si llega a haber una manifestación de Dios aquí, caías muerto ahora mismo”. La imprudencia de él allí al abrir la puerta.

Ahora, eso puede ocurrir también si pasa lo mismo dentro de la Iglesia, a la cual ya se le ha venido diciendo cómo debe actuar la persona y cómo deben estar delante de Dios y todo; aunque vengan con… los “caras volteadas”, dice el hermano Branham ahí; los que están allí (y yo no sé para qué vienen; es mejor que se queden en la casa); pero todo eso, en algún momento, si no se enderezan, pueden caer en eso de los hijos de Aarón.

Vienen al Lugar Santísimo de Dios con fuego extraño y pueden caer fritos. Y lo primero que ocurre es muerte espiritual, que fue lo último que ocurrió con la última plaga de Egipto. Y se viene diciendo para que después no digan…

Mira, por nada más decirle a una persona…, mira eso de ayer: [WMB] “Dile que yo no estoy”, y se fue. Eso todo el mundo lo hemos hecho.

[WMB] “Dile que yo no estoy”. Esa simple mentira hizo que ese bebé no fuera sanado. Y lo compara con sanidad. Ni siquiera fue porque le salió algo mal de algún negocio, o le salió algo mal de algo. No. Fue con sanidad.

O sea que para sanidad de nuestro cuerpo no puede haber nada de pecado, ni tan siquiera eso que es tan…, que fue a través de una tercera persona, porque ni siquiera fue él. [WMB] “Ve y dile”. O sea, mandó a mentir a la mujer. Y después el nene: [WMB] “¿Quieres que diga lo mismo?”. ¿Ve cómo el pecado…?, dice ahí que corrompe.

Ahora, si eso es así en un hombre como el hermano Branham, que nunca falló, imagínate dónde quedará, dónde queda el pueblo hoy.

Por eso en este tiempo el hermano William tuvo que estar entre el pueblo, en esa forma en que estuvo; porque si no, él solo hubiese quedado; o sea, no hubiese cumplimiento de nada; porque, un pueblo pecaminoso y todo, imagínate ¿cómo va a llegar?

Pero gracias a Dios por este tiempo sobrante que nos dio, porque si no… Y así quería la gente o quiere la gente llegar.

Ni siquiera por lógica, ni siquiera por sentido común te dice que tú vas a llegar a ese cuerpo transformado y a ver a esa sexta dimensión estando como estás. No tiene ni lógica.

Y aun así hay algunos que todavía siguen estando como: “No, así estoy bien”, o: “No tengo que cambiar nada, porque yo ya recibí el mensajero, el Mensaje; ya no necesito más nada”.

Ni por lógica puede una persona, estando de esa forma, llegar a la adopción. No, es que no puede ser.

Pero como es para el que es escogido… Y no puede ser de otra manera. El que es escogido: va a seguir fielmente las instrucciones y la obediencia; que es lo importante: ser obediente.

Y si no entiende, pues se queda callado. ¿Qué saca con hablar? ¿Qué? ¿Cuál es…?

Condenarse más; pero ¿qué sacas con hablar?, ¿cuál es el resultado, el fin? ¿Te satisface en qué? O sea, ¿entiendes? Es que ni siquiera por buen negociante.

Porque ni un buen negociante hace eso; ni un buen negociante… Por ser buen negociante, un empresario (vamos a decir), y sabe que hay un negocio que no le va a ser…, pues ve la manera, la forma: “Voy a hablar en contra, pero ¿qué me va a satisfacer a mí?, si lo que estoy luchando es por mi adopción. Si hablo en contra y todo, estoy hablando, pronunciando cosas negativas. Espérate, eso no es de una persona que va a ser adoptada; por ende, tengo que quedarme callado”.

¿Cómo va a haber odio, rencor, raíz de amargura y cosas así en alguien que está esperando adopción? ¡No puede ser! Para empezar, ya eso es un espíritu de la quinta dimensión.

No puede ser alguien que esté conectado con la sexta dimensión, porque la sexta dimensión no tiene nada de eso. Esos son los requisitos que tiene que llenar el escogido, el que es: el requisito de mantenerse ahí en la dimensión sexta, que es donde… Todo lo que debemos de reflejar es de ahí. No puede haber nada ¡pero nada! de la quinta dimensión. Y si es nada: es nada. No puede haber nada que te pueda… Si ves que…

Bueno, él dice ahí en una parte que si tu mano te es ocasión de caer, córtatela10, porque…

O sea, ahí habla de muchas cosas.

Es como cuando él dice allí de [WMB] “no casarse con una incrédula, o una que no es creyente”, y él después le escribe ahí arriba: [WSS] «bajo ninguna circunstancia».

Y tú vienes… Pero ¿qué circunstancias pueden ser que te obliguen a casarte con una de afuera? Un hijo, que haya salido ella embarazada, y que digas: “Ah, pues como tuve un hijo, pues me voy a tener que casar con ella”. La responsabilidad es mantenerlo, porque tampoco vas a dejarlo ahí abandonado ya después que metiste las patas. Eso es una de las circunstancias.

Pero tú hablas eso, y dicen: “Ay, mira a ‘este’, ahora no quiere…”. Pero “bajo ninguna circunstancia” es todo.

—“No, que no, que fue…; que es porque yo la amo”. Otra circunstancia más. Pues deja de amarla.
“Es que voy a tener que entregar la casa, porque estábamos viviendo en la misma casa, y ahora me va a botar”.

¡Pues vete! O sea, son circunstancias.

Si es “bajo ninguna circunstancia” es ninguna circunstancia.

O sea que ahí no hay… Y si lo hace, ya es en la permisiva; ya hay consecuencias. Ya entonces cumple la mitad. Hay una parte donde él dice que [WSS] “estaría cumpliendo la mitad del tipo de Cristo y Su Iglesia”. No estaría haciendo completo el tipo y figura.

Ese mensaje de ayer es para uno desmenuzarlo, y el del viernes. Del jueves para acá, algo estuvo moviéndose.

¿Viste ahí? Elías le captó la atención a la viuda. Le dijo: “Espérate, pero sírveme a mí”.

Y hay otra línea más que pues… Es que… ¡hay tantas! que… pero coge una a una, y aun así mira todo el tiempo que coge.

Pero fíjate, donde estaba parado él fue en la puerta.

¿Ve que siempre tiene que ser a través de una puerta?

Y ahí cuando Elías le dijo: [WMB] “Solamente cree en mí, sírveme a mí, tenme a mí primero”. Y ahí no le faltó nada a ella. Como no le va a faltar nada a la Iglesia en cuanto a la Palabra revelada en este tiempo, porque están poniendo primero a la etapa, a la Obra.

Porque es algo que lo que necesitamos es eso: poner primero la Palabra revelada, y después van a venir los milagros.

Aquellos están poniendo primero la esperanza en los milagros y no en la Puerta.

[Trabajador: Vienen a ser seguidores de señales también].

De señales, sí. Nosotros estamos poniendo primero la Palabra; primero a través del instrumento que Dios envió; y después, ya después vienen los milagros. Eso lo habló al final, en el último extracto que les leí: para que sepan y estén conscientes que primero va a ser la Palabra, y después los milagros.

Pero entonces dicen: “No, porque es que cuando él venga es que va a predicar”. [Suspiro].

¿Dónde ha ocurrido eso en el pasado?

Hasta por lógica. Estás limitando a Dios en las cosas que Él va a cumplir; porque lo estás poniendo a él otra vez a ponerse chaqueta, corbata, a pararse otra vez frente al micrófono. ¿Cómo tú vas a limitar un cuerpo así en medio nuestro?

Cuando Jesús apareció, Él les mostró y les abrió las Escrituras. Mira los diferentes ángulos que tiene esa parte de Jesús: les abrió las Escrituras, les abrió el entendimiento11; era Jesús mismo. Lo mismo que está pasando ahora: ¡Es Él mismo el que está haciendo la Obra!

Pero si lo ves del otro ángulo: fue el Día de Pentecostés con los discípulos. Ahí no estaba Jesús. Pero cuando le dijo a Pablo: “Pablo, Pablo, ¿por qué me persigues?”12. ¡Era Él! Pero Él no vino otra vez a pararse con gente: “Vengan por aquí, vamos a predicarles ahí a la falda de la montaña. Siéntense ahí”; pues, como les predicó a los cinco mil allí13, y comieron…, los otros… ¡No!, Él no hizo esa Obra así en ese cuerpo glorificado.

Glorificado. Es una diferencia… Porque ahora es que uno va a estar viviendo lo que vivió Jesús en estos cuerpos, lo que vivió el hermano Branham, que podía decir: [WMB] “Que aparezca una ardilla allí”, o que podía parar la tempestad, o que podía salvar a unos niños: los hijos de la hermana Hattie Wright. Detener el sol.

Esos son los ministerios de Moisés y Elías. Ahí tienen poder sobre la naturaleza. Pero todo eso, nosotros… Porque con un cuerpo eterno así va a ser algo muy fácil; ¡pero en estos cuerpos lograr hacer todo eso! Esa experiencia es única.

Como la que vamos a estar viendo o estamos viendo en estos días: un cometa. 50.000 años que no ha pasado, una experiencia que en estos cuerpos no vamos a volver otra vez a vivir. Así mismo, estando en estos cuerpos, es la última experiencia que vamos a tener del poder de Dios en nosotros.

[Trabajador: Eso sí es un privilegio].

¿Que qué? ¡Muchacho! ¿Que Dios confíe en ti y en mí el poder de Él!

Es como tú confiarle a alguien un carro que tú acabas de comprar o confiarle las llaves de tu hogar a alguien. Pues Él confió las llaves del corazón de Él mismo, porque es el poder de Él en nosotros.

Y tener uno ese poder, conociendo cómo usarlo; porque no vamos a estar así haciendo lo que se les da la gana, sino que vamos a estar dirigidos por…

Pero ya el tener el… Vamos a ser como con los radios walkie-talkies: que yo te estoy hablando a ti y tú tienes allá el otro walkie-talkie; pero el que está ahí no tiene eso y no puede escuchar nada. Pero en cambio a ti sí te puedo decir: “Dale para acá, ven acá, dale para allá”. ¿Cómo personas se pueden estar moviendo en medio de un grupo? Y solamente se mueven esas personas, porque escucharon la dirección del que les está diciendo. Algo así va a ocurrir.

Así que imagínate: “Ven para acá, vamos hasta a…”, porque estamos en esa dimensión ya más rápida; ya vamos a poder escucharnos, hablarnos; no va a haber limitaciones de nada. Subconsciente y consciente juntos ahí, pero en estos cuerpos.

¡Es un poder grande! No te creas que dirigir un grupo de gente como estaba… Y tú ves la Visión, todo tan organizado. Eso no lo hace así cualquiera… hay una directriz, un orden ahí.

Y ya para ese tiempo tiene que haber hijos de Dios adoptados allí. Por lo menos uno ya está adoptado. Ya los demás tienen que ir yendo… Porque la adopción es como la resurrección; dice: [WMB] “Mira cómo se mueve la resurrección”; o sea que hay un proceso.

Van a ir resucitando…; y de seguro la transformación va a ser también así. Unos que van viendo primero, y va a ver…

La Fe de Rapto se basa en el conocimiento de la Venida del Señor, basado en cómo Dios la está cumpliendo. Como lo fue la Primera Venida: lograr creer eso te da acceso a tener la teofanía; y ya la tenemos. Ahora, lograr el acceso a la adopción, a la transformación, es creer; porque siempre tienes que estar basado en alguien, en algo.

Y eso es lo que se hace difícil al ser humano que no va a ser adoptado, transformado: creer.

Lo primero que van a decir: “¡No puede ser! Imposible que sea eso. Pero si a este yo lo vi montándome una puerta en casa cuando era más pequeño. Me hizo los gabinetes o el vanity [gabinete de baño]”.

Todo eso en forma tan sencilla. Y uno lo habla porque es así.

—“¿Cómo va a ser?, pues si este estuvo conmigo haciendo ahí esto; fuimos a tal sitio, y aquí y allá”.

Pues ese mismo Dios escogió para cumplir Su promesa. No puede ir… ¿Qué tú quieres que yo haga?, ¿pelear con Dios entonces? “Vete al principio y dile que cambie los Planos”. Ya el Plano estaba hecho, ya no hay forma de cambiar esa hoja.

Esa pieza musical se va a tocar porque se va a tocar. Esa octava, esa nota más alta, la toca porque la toca. No puede venir alguien a decirle al maestro: “Cámbiate esa hoja. Toma, ponte esta”. No. Ya Dios escogió a esa persona, y Dios la va a ayudar a llegar a cumplir el propósito por el cual ya Él lo escogió.

Y nos está ayudando, y nos seguirá ayudando. Porque es Su Obra. Es Él. Es Su Programa. Por ende, tiene que estar Él velándolo para que se cumpla. Y Él es el que nos va guiando y nos va a llevar hasta el fiel cumplimiento; hasta lo que todos deseaban, que era el cumplimiento de la Visión de la Carpa.

Ya está la Carpa, ya está el pueblo, está el mensajero, está el Mensaje, ¿qué falta?

Él esperando por el pueblo. ¿Ve? Todas esas cosas que se van hablando es para avanzar. Él está listo, es “nosotros” los que falta.

Algunas cosas se pueden empezar. Pero ¿de qué vale que vean para que después estén creyendo por señales? Mejor…

Como cuando él me decía:

— [WSS] “Vas a saber cuándo. Espera”.

Ese “espera”… Estoy viendo, pero posiblemente es pronto.

Pero mientras el pueblo siga así: que hay algunos por aquí, otros por allá; esa sacudida es la que… La Palabra se ha estado dando, pero si no entran en esa desesperación y no hay algo que en realidad estremezca al pueblo, Dios no puede pasar a esa otra etapa.

Y lamentablemente, por lo que se ve, lo que hemos hablado (y cualquiera dice: “Pero ‘este’ se pasa hablando de eso”), pues: es muerte.

Y ya ahí, cuando empiecen a haber las muertes así, ahí es donde va a estar lo triste, y a la misma vez lo que va a hacer que el pueblo entonces ande más derecho.

Entonces lo que aparenta que va a ser algo triste para la Iglesia: va a ser algo de bendición; porque entonces sí el pueblo se va a enderezar; y ahí entonces Dios va a obrar ya para que entre ya esa etapa.

Después que esté claro ya lo que es el cumplimiento de Su Venida y cómo la está cumpliendo, que ya el pueblo lo entienda: bien adelante, en cualquier momento…

Es la clave ahí: está en la revelación del Séptimo Sello. Una vez que ya esté bien clara en el pueblo, y crean, ya ahí no hay… no va a haber barreras ya. Pero en lo que llega eso, si tiene que ocurrir… por lo que se ve, va a ocurrir.

Porque si es los días de Ananías y Safira que se repiten, y es en una Carpa; por ende, se va a cumplir. Le van a mentir al…; y mira, lo que ahí había era mentira también.

Como algunos que decían “que creían, que creían, que creían”; y después no creen; y lo que han hecho es combatir; pues ¡les va a salir ahora más caro!, porque tras que mintieron, también se volvieron en contra. O sea, reciben más juicio que aquel que fue sincero y dijo: “Mira, yo no creo, yo… (abiertamente), pero sigan para adelante”. Ese puede salir mejor.

Pero el que para colmo mintió, y especialmente también al hermano Miguel; y después le da la puñalada por detrás y se va: ese va a tener unas graves consecuencias. Porque piensan que esto es un juego. Que porque creen que en el Mensaje del hermano William y su… y que lo tienen a él, ya con eso lo tienen todo. La tremenda sorpresa que se van a llevar. Y no te creas que son poquitos, ¡son muchos! Y otros que están calladitos, que no dicen nada, pero por dentro es otra cosa.

Pero como Dios discierne las intenciones desde el corazón: todo queda no oculto, todo queda abierto. Sí.

Pero lo que Dios nos ha dado es algo tan grande pero tan grande, que uno lo busca para uno tratar de… ¡Wao! Es que es algo que… Todo lo que desearon los profetas y en todos los tiempos… ¿y que ahora nosotros lo estemos viviendo y palpando?

Imagínate, de dos millones entraron dos. De Egipto, y entraron dos: Josué y Caleb. Claro, de los 20 años para abajo entraron.

[Trabajador: Entraron los que nacieron en el camino].

En el camino. Pero de los que salieron: solamente dos. ¡Imagínate!

Es como cuando él dijo allí en esa parte que él dice que: [WMB] “Dame una Iglesia… que queden 100 o 200 personas”, algo así, en el…; pero que esté bien, o sea, que esté… Y yo voy a verificar, pero en el Tabernáculo Branham allí… (yo fui) allí no caben 200 personas, no hay espacio de 200, sentadas; o sea, él estaba mirando más adelante.

Y tú miras más o menos, van quedando por ahí (no es que haya… ¡hay más! pero…), más o menos por ahí es el número de las personas aquí que pueden estar firmes. Los demás pueden ser simpatizantes, otros que vienen por escuchar… por ir a un sitio y tener un domingo en un sitio. Por eso dice: “No son todos los que están, ni son todos los que son”. (¿Así es que dice?). Algo así.

Sí. Porque el grupo que va a ser adoptado ese es bien selecto. Es el que…

Uno dice: “¿Y cómo uno puede saber eso?”. Cuando logran ver a través de la Puerta. Si no es obstáculo la Puerta para usted: usted está más adentro que… Porque después que tú pasas la Puerta y ves todo lo que Dios está haciendo y obrando, eso te da una seguridad. Es bien importante; porque si te trancas ahí, entonces no puedes ver lo que hay dentro.

Te quedas afuera, por eso no recibes nada. Hacen como la lagartija, que dice el hermano William que se les mete… les entra por aquí y sale por acá; los oídos de lagartija… oídos de lagartijo, exacto. No, no…, no les llega al alma, porque como no están entrando a través de esa Puerta, pues se tropiezan con esa imagen.

No lo he encontrado, donde él dice: [WBM] “Si yo pudiera esconderme…”. Porque hay varios sitios donde él dice que [WMB] “Escucharán mi voz…”, ahí en las Citas hay varios; pero hay un lugar donde él dice: [WMB] “Si yo pudiera esconderme y no que me vean a mí”. Porque siempre el problema es el velo. [WMB] “Si pudiera yo esconderme…”. Pues en algún momento va a haber, va a llegar eso: que lo que van a escuchar es la Voz.

• Pero fíjate cómo Dios nos ha ido ayudando y estamos familiarizados en audio. Y cualquiera diría como que estamos yendo para atrás; pero como es una profecía que se va a cumplir, pues se usa.

Y vea que es más fácil hasta para bajarlo por las aplicaciones, no es tan pesado. Y ya ahora cuando tú dices: “Escuchar un audio”, es algo normal. Que cuando llegue el momento: a lo mejor ni siquiera vas a ver nada, pero vas a estar escuchando.

Por ende, mira…, cuando el hermano Branham (una de las tantas veces), pues estaba en El Cairo para ir a Israel, y dice que sintió y oyó: [WMB] “No es tu tiempo, regrésate”. Y él dijo: [WMB] “Pero ¿quién me habrá hablado?”. ¿Ve que Dios siempre usa la Voz?

• En el Huerto del Edén oyó la Voz: “¿Dónde estás, Adán?”. Dice que oyó la Voz de Dios que lo buscaba14.

• Y si te buscas otro sitio: En medio de la zarza, ¿qué oyó Moisés? La Voz. No vio a nadie allí15.

• La Voz que salió cuando Jesús estaba siendo adoptado: no vieron a nadie, quién estaba hablando ahí. Una Voz16.

• En la sexta dimensión, el hermano Branham, él dice que [WMB] “no sabía de dónde venía la Voz”17; luego, después lo ve ahí, al Ángel.

O sea que la Voz es lo primero que vamos a escuchar; y luego esas teofanías entran.

Nadie va a estar dándose cuenta, pero… por eso dice: [WMB] “Ellos están ahí y no están”18. Algo así dice.

Algo con la Voz, que va el escogido a escuchar; pues: “Mis ovejas oyen Mi Voz, y me siguen”. No dice: “Mis ovejas ven y oyen”. No. “Oyen la Voz”. Y eso va a ser en el individuo, como persona. Va a estar escuchando. Sí.

Y eso va a estar en… estamos acostumbrándonos a eso: a la Voz. El que la escuche… Vea, estamos ahora, mira, los hermanos: “¡Uy!, ¡ya subió un audio!”. Y tú ves cómo…: “¡Vamos a escucharlo!”.

Otros: “Ay, otra vez con eso”. No le prestan atención a esa Voz.

Cuando se está hablando cosas en varios…; y otro poquito, otro poquito, otro poquito; y al final, la finalidad de todo eso, es la adopción.

—“Oye, pero yo escuché este y aquel y aquel”.
—“Sí, pero tú escuchaste este, aquel y aquel para criticar”.

Esa partecita que usted criticó…; porque casi siempre: “Búscate en el minuto ‘tal’ donde él habla ‘tal cosa’”. Y tú ves que van y buscan el minuto tal para hablar de eso que se habló.

Ahora, la adopción no la van a poder buscar así; porque eso es por revelación. No pueden ir para atrás a buscar los audios, y darle para el frente a tratar de avanzar y escuchar, escuchar y escuchar, para también obtener lo mismo.

Esos son los que van a venir a tocar la puerta… O sea, van a tocar en el cumplimiento de la Venida del Señor. Ahora sí van a tocar, pero antes ni siquiera la miraban.

Por eso miren… Van a querer entrar, pero ¿por dónde? Por la Puerta que aquellos mismos que entraron…; que tenían Aceite: entraron.

Pero esos otros no fueron a tocar… Si tú te fijas no dice que fueron a tocar a otra puerta, a la Dispensación de la…, a la Edad de la Laodicea, ni a la Edad de Wesley.

Vinieron a tocar a la Puerta, porque es donde estaban las vírgenes prudentes; y les dijeron: “Vayan y busquen ustedes Aceite”. O sea que están ahí con nosotros.

Y tocaron ¿qué Puerta? La Puerta de la Venida del Señor. Al tocar ahí, entonces en ese momento sí reconocieron Quién era; porque sabían que ese era el que les había dado el Aceite a ellas.

Tocaron, pero ya estaba cerrada. No hay break [oportunidad]. Incluso, hasta Él dice ahí: “Yo no os conozco”19. ¿Sabes lo que es eso? Es… Las desechó, las despreció. Ya en la gran tribulación ahí tienen que dar sus vidas. Y no tener la oportunidad de estar en el Milenio, porque todas ellas van a resucitar es después del Milenio.

Por eso ¡todos! (porque no hay ni uno) los que se han levantado en contra, y todos los que no han aceptado la Puerta, el velo: ¡todos! no van a obtener la bendición de pasar por el Milenio.

Si pasan en la gran tribulación y entran vivos al Milenio: mueren, y resucitan después; porque Dios no quiere incrédulos en el Milenio. ¡Punto!

Ahí no hay personas que… no hay nadie que va…

Por eso es que los 144.000 son sellados antes. Pero como ellos no recibieron al Señor en Su Primera Venida, no tienen el Sacrificio, entonces tienen que entrar a través de la purificación: como va a hacer la Tierra y las fatuas.

Pero ellos sí van a tener la oportunidad de entrar al Milenio, porque ellos resucitan después de la gran tribulación. Son los únicos que resucitan después de la gran tribulación, para ser los eunucos de la Iglesia.

¡Mira qué cosa! Para unos: tienen la oportunidad; y otros: no van a tener la oportunidad.

Porque como ellos creen: van a creer en el otro Propiciatorio; automáticamente… Ellos creen en la Lluvia Tardía, creen en el misterio de la Segunda Venida, y luego van a entender la Primera; pero como ya la Puerta de la Primera se cerró, automáticamente tienen que pasar por la tribulación para ser purificados, pero bajo ese Propiciatorio.

Las fatuas, esas no tienen esa oportunidad; aunque tengan un tiempo de conocer… Porque fíjate que el mundo denominacional, cuando vea todo: van a creer; pero tienen que ser purificadas; pero no para entrar al Milenio sino después (y si salen bien), en el Juicio Final. Todo eso va a depender de la intención del corazón de ellos.

• El ciento por uno [100×1]20. Fíjate cómo siempre entendíamos, y en los mensajes tú escuchas del 30, al 60 y al 100, que eran los escogidos que iban a ser todos adoptados. Y mira cómo ahora el escogido, el adoptado, ¡no puede ser menos de 100!

Y él lo pone 60 [60×1]: los 144.000.

Y los 30 [30×1]: el resto. O sea, mete ahí a las fatuas, y mete ahí también a los de este tiempo que no están creyéndolo; los mete en ese grupo. Producen algo de fruto, pero no el fruto para adopción. Imagínate. Porque para Dios no puede ser 30 ni 60, tiene que ser 100.

Produce (¡claro!), porque los 144.000 producen fruto; las fatuas producen fruto. Pero el escogido produce es 100, ciento por ciento. Y eso es: producen la revelación. Se reproduce en ellos la revelación completa de Quién es Él. ¡Mira qué sencillo!

Cómo producir a ciento por uno: Creyendo en la Palabra revelada, creyendo en el cumplimiento de Sus promesas totalmente.

—“Que algo… no entiendo algo; pero ¡yo lo creo! Que no entiendo esto cómo…; ¡pero lo creo!”.

Y tú ves cómo se va abriendo el panorama: “Ay, pero esto…”.

Y de momento: “¡Ay, pero ya yo lo entendí! Y esto que yo pensaba que no lo entendía, ahora lo entiendo”.

Como todo está siendo abierto.

Pero fíjate, cualquiera diría al principio: “No, no leas esas cosas que son del hermano William; los escritos. Yo no voy a difundir eso…, porque eso es algo ahí privado, que eso…”. Mira, ahora se lo están poniendo ahí en las manos y ni siquiera están creyendo eso.

¿Ve que no es…? Tú le puedes enseñar lo que significa una y otra cosa; y el que no es escogido: lo puede leer y no le va a producir nada; puede estar ahí en la cara, y no creerlo.

Pero el escogido sí. Es lo que nos faltaba a nosotros. Nos faltaba esa parte de la Fe de Rapto de los Truenos.

Mira dónde se iban a abrir los Truenos, y todo el mundo decía que ya fueron dados. ¡Ahora es que es la realidad del cumplimiento de los Siete Truenos!

Porque él decía en el setenta y pico, y 80 y 90: [WSS] “Los Siete Truenos que están dando la Fe de Rapto. Los Siete Truenos que están dando esto. Están predicando los Siete Truenos”. Pero después dice: [WSS] “Cuando los Siete Truenos sean hablados en la Carpa…”.

—“¿Pero no estaba…? ¿No decías que…?”.

Potencialmente había sido hablado allá; ahora es la realidad.

“Pero ¿en esa forma así tan sencilla?”. En esa forma.

Lo mismo que el Arcángel le dice al hermano Branham… Mira que la conversación de ellos fue esta: Estaba él ahí parado mirando hacia allá, y él dice…

Por eso yo y que no tenía alguien al… Bueno, tení-…, bueno no… bueno, tenía, pero no… [Risas]. Pero que él hubiese hecho…21

A ver, el cuartito está allá. Él lo que hizo es esto: [WMB] “La mano se movió frente a mí, y señaló”. Mira, mira la… hacia dónde va. Le dijo eso, ¿verdad?

Y después el hermano Branham dice: [WMB] “Pero yo no entiendo ¿por qué allí?”.

Y enseguida lo que dijo el Ángel fue: [WMB] “¿No dice la Escritura: ‘Cuando tú…’?”.

¿Te fijaste que él no se puso…? a explicarle cosas, a decirle que esto es así. Él se fue a la Escritura. Y todo lo que está siendo hablado ahí es escritural.

Todo es basado en esos dos Mensajes: uno que es la plataforma de lo que iba a pasar; y ahora se está hablando con las definiciones de ese que tenía acceso al Libro de la Verdad, escrito ahí. O sea, vamos a decir que ahí se están cumpliendo también los dos palos, si uno lo pone en cuanto a Mensaje.

Eso de los palos… Para uno seguir desmenuzando. Eso fue el del jueves.

Pero es algo tan tremendo que uno no quisiera terminar, de lo grande que es este tiempo. Como todo es el cumplimiento de lo que ya fue hablado, por eso es algo sin fin.

Por eso dice: [WMB] “Si alguien se mete de lleno a este Mensaje, lo lanzaría a eternidad sin saberlo”22, o sea, sin darnos cuenta.

¿Cómo? ¡Pues si se están metiendo en las aguas profundas de la Palabra!, ¡claro que van a ser adoptados, transformados!

Esto ya es más que álgebra, esto se metió ya a física con geometría, con trigonometría, con lo más ía que puede haber. [Risas].

El que no empezó con el ABC. Para aprender uno unas… tiene que saber algunas fórmulas; y si no tiene la fórmula —como la del H2O—, si no tiene la fórmula ahora, del Hijo del Hombre con Sus Ángeles23: H2O, en cuanto a los ministerios; el que no tenga esa fórmula: no puede obtener el Agua, la revelación. Tiene que tener esa fórmula para obtener la revelación.

Pero esa visita de Elohim con Gabriel y Miguel allá a Abraham es lo que se repite ahora. Ahí está la clave.

Si tú logras entender qué pasó allí, esa es la parte clave: Elohim en medio de Su pueblo. Eso es algo… pero Él se muestra en forma… Lo que es esa Visita es… ahí está la clave. El tiempo que estuvo Él allí con Abraham… Ya ahí lo vamos a ver en otro audio; pero… es tremendo.

Mira, lo que está pasando ¡es eso mismo actualizado! Y ya una vez que tú lo veas… Él no le encubrió a Abraham lo que Él iba a hacer; o sea, se lo dio a conocer.

Dios te bendiga.


1 San Juan 5:19, 8:28

2 San Juan 6:31-49

3 San Juan 6:58

4 Deuteronomio 18:18

5 San Mateo 15:14

6 Estudio “La Edad de Oro de la Piedra Angular”, 2022/sep/02-1 (viernes), pág. 21 del (f), pág. 47 del (T1)

7 San Lucas 2:41-50

8 2016-12-30 “El Año Nuevo. Introducción”

9 Levítico 10:1-2

10 San Mateo 5:30:

30 Y si tu mano derecha te es ocasión de caer, córtala, y échala de ti; pues mejor te es que se pierda uno de tus miembros, y no que todo tu cuerpo sea echado al infierno.

11 San Lucas 24:30-32

12 Hechos 9:3-4

13 San Mateo 14:13-21

14 Génesis 3:8-9

15 Éxodo 3:1-4

16 Mt. 17:1-5, Mr. 9:2-7, Lc. 9:28-35

17 Los Sellos, pág. 320, párr. 196

18 Citas, pág. 159, párr. 1418

19 San Mateo 25:10-12

20 Estudio “Los requisitos para la adopción de un hijo de Dios”, 2022/ abr/30 (sábado), págs. 32-33 del (f), págs. 456-457 del (T)

21 JBP está haciendo referencia a la explicación de la conversación del Ángel con el Hno. Branham, que dio en el Estudio Bíblico #275, 2023/ene/22 (domingo), págs. 32-33 del (f), págs. 126-127 del (T4)

22 Citas, pág. 105, párr. 910

23 Estudio “Cristo = El hombre ungido”, 2022/12/08 (jueves), págs. 5-7 del (f), págs. 45-47 del (T2)

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