Plática con los obreros de La Gran Carpa Catedral “Las etapas en el cumplimiento de la Carpa”

(Primer saludo)

Esa agua… ¿viste lo de los ríos?

[Trabajador: Sí].

5 arroyos es gracia. Cómo él dice que el… ¿cómo se llama, el que… el hombre?, ¿viste que fue un trabajador? Baja… Echa el agua en el recipiente, y el agua baja por todas las edades¹.

Por eso en Zacarías, donde dice que vierte por un tubo de aceite, en dos olivos, y desde ahí es que sale el aceite²: el Espíritu Santo.

Y cómo baja esa Fuente de Agua hacia las edades; pero llega un momento en donde se le echa miel. Y la miel, como… ¿ves que cuando baja la miel se va deteniendo?, va deteniendo, va deteniendo, y va aguantándose³… Eso quiere decir que el Espíritu Santo iba saliendo de cada edad, en cada edad, en cada ed-…, saliendo, saliendo. Y esa sí es la que se retiene arriba. Esa es la que selló ahí el… sella, la corona —la Iglesia—, la corona con Amor.

Pero ellos tuvieron parte de ese Amor, porque llegó a bajar la Miel. Y ahí ella decía: “¿Bajará esto hasta acá?, ¿bajará eso hasta aquí?”. Pero iba reteniéndolo Dios.

Claro, se iba muriendo el mensajero, selló el… con el grupo, hasta que llegó a la parte de arriba: amor fraternal, que era la parte del hermano Branham. Y por eso es que allá, en Apocalipsis 10, él pone allí: [WSS] «Miel = amor fraternal»⁴, en la séptima edad, representando la Piedra Angular pero en la parte séptima, donde el agua iba a dejar de correr en nuestro tiempo; y agua es la Palabra.

Iba también (Dios), terminando cada etapa en nuestro tiempo, iba a llegar hasta la séptima edad con el hermano William: el amor fraternal; y después, en la Piedra Angular, que es en la que subimos: ahí ya se queda la Miel, que es dulce; pero es la batalla más grande que va a haber; por eso es que es amargo en el vientre, porque es la lucha que no tuvieron las edades. La tuvieron en porciones, pero la lucha más grande y la batalla más grande es en la Piedra Angular; por eso es amargo en el vientre.

Viene a ser la Palabra, cuando el mensajero habla: es dulce. Tuvieron esa Miel en la boca, porque bajó; pero llegó un punto en que el que se lo come… Ellos no tuvieron eso en el vientre. Y quizás en porciones, representando este tiempo cuando se come el Libro: “Amargó mi vientre”⁵. ¿Y dónde eso ocurre? Ahora.

Por eso es que el hermano William tenía que regresar también. Una de las cosas era: tenía que entregar el Cetro. Cuando se venía hablando de que… yo decía en enero, febrero, que él…; y desde antes (2019 cuando él partió; 2020)⁶, yo relataba que él decía: [WSS] “Tengo el Título”.

Y Dios iba obrando entre nosotros y mostrándonos, así como lo hizo con el hermano Branham y como lo hizo con el hermano William.

El hermano Branham quería huir del ministerio. Muchas veces se intentó matar… cuando le pasó lo de la esposa que murió, y la hija⁷.

El hermano William también: no sabía qué estaba pasando en su vida, pensaba que el hermano Branham era el cumplimiento de todo. ¿Ve? Dios se lo fue mostrando.

Y así también se iba hablando acá del hermano William, de que él tenía el Título, y todos enfocándolo en él. Pero Dios siguió abriendo el cuadro.

Fíjate que el tiempo en que murió Moisés hasta el tiempo en que entraron: ellos estaban detenidos. Había un tiempo de… había allí… los ancianos decían: “Bueno, si el Dios que estaba con Moisés está contigo, nosotros estamos contigo”⁸. ¿Viste? Había como una luchita allí. No crea que eso era así de fácil.

Ayer se habló alguito, de que cualquiera podría decir: “No. Moisés nos sacó, y tiene que ser él. De seguro esto está pasando lo mismo que pasó cuando él subió al monte: que estuvo 40 días allá. Vamos a esperarlo”. Y todo eso ¿no ves que está pasando ahora mismo? Muchos hermanos están diciendo que es que él va a volver otra vez.

Y ese tiempo ahí… Lo que pasa es que la Biblia no lo detalla tanto. La Biblia no podía detallar el contenido de parte del Séptimo Sello.

El Séptimo Sello viene desde el Génesis, dice el hermano Branham⁹. Y si se daban detalles, el enemigo iba a saber cómo iba a ser el final, e iba a tratar entonces de ajustar el ataque: “Ah, pues entonces…, si es que no es Moisés, pues déjame…; y no es William; pues déjame levantar a alguien por aquí que se parezca más o menos”; y el ataque hubiese sido de otra forma.

Pero como no se dijo nada. Allí no hubo detalles de esa lucha en el tiempo de Moisés y Josué, no hubo esa… esos detalles de que estaban allí diciendo si era o no Josué el que los iba a entrar.

Los que lo recibieron lo habían identificado ya por la trayectoria que llevaba, y ya veían que había algo en él.

Y lo otro: ya lo habían ungido; de seguro eso se corrió por todo el… Pues imagínate cuántos millones había allí. ¿Dos millones eran? Algo así. Aunque murieron muchos después. Pero en ese tiempo en que lo ungieron, hay qué ver cuántos había allí más o menos.

Sabían que había pasado algo; y lo veían como algo normal, porque los hijos de Aarón fueron ungidos también, y…: “Ah, eso es algo normal”. Pero aquellos que estaban pendientes: “Mira, ¡con razón pasó tal cosa!”.

¿No pasó lo mismo cuando él mandó a Miguel, que dijo: [WSS] “Ve y úngelo”? Miguel dice: [MBM] “Nunca en la historia de mi ministerio yo había hecho eso”¹⁰. Entonces algo había allí.

Y hay una parte donde él escribe que…, algo así de Aarón; habla de la boca de Moisés; pero Aarón representa a alguien importante.

Y Moisés, cuando le dice: “Dile que unja a…”. No estamos diciendo que, vamos a decir, que…, porque él pone [WSS] «Moisés y Aarón, tipo de los Dos Olivos». Eso yo no lo he leído, ¿verdad?

[Trabajador: No…].

En estos días estuve leyéndolo: que Moisés y Aarón en ese tiempo es tipo de… Y Zorobabel y Josué también. Y pone algo más: representan y reflejan, estaban reflejando los Dos Olivos¹¹.

O sea que… Mira ahí la posición de Aarón, como se la coloca Dios ahí. Aunque hizo lo que hizo, pero era la boca de Moisés. La boca de Dios era Moisés, y la boca de Moisés era Aarón¹².

Pero esa parte está interesante: de cómo el pueblo allí, en esos 5 años, estaba preparándose para (vamos a decir) estar firmes con el líder. Después que él viene y les dice entonces ya para entrar: “Bueno, santificaos, que mañana vamos a (o dentro de 3 días, creo que fue), vamos a entrar”¹³. Pero antes hubo una batalla primero, en identificar el líder.

Siempre ha sido así. Porque para tú entrar a un sitio tiene que haber un portero que te diga: “Vamos a entrar por donde él dice”. Pero si tú no crees en el portero, vas a tratar de entrar por otro lugar, esperando lo mismo que te va a dar el que está ahí, pero vas a tratar de entrar por la ventana.

Y aquí hay muchos que están entrando por la ventana, tratando de entrar por la ventana; y ahí, al tratar de entrar por la ventana, cuando entran…; por eso él dice: “Los ven sentados ahí con ustedes”¹⁴.

Cuando aparece el Rey, dice: “Espérate”; empieza esos Dos Ángeles segadores a sacar. “Espérate, tú no estás aquí, tú no vas aquí. Tú entraste por la puerta que no es”, aunque sigan sentados ahí.

Se cumple es aquí, no allá en la Cena. Y eso es lo que está pasando, y la misma gente no se da cuenta. Los que están siendo sacados no se dan cuenta que están fuera ya.

Y otra cosa: cuando él volvió, fíjate que estuvo dos años – un año y algo; yo creo que él no llegó a dos años; estuvo parte dentro de ese tiempo; y también él tenía que dejar el Título, el Cetro, ahí es donde estaba el engranaje final de una dispensación y el comienzo de otra.

Pero el tiempo, miren, el tiempo que Juan…, por eso es que él dice que [WMB] sería precursor del Mesías, en unas partes; que [WMB] vendría Elías precursando al Mesías¹⁵; y en otra parte dice: [WMB] “Elías presentará”, o “los llevará al Mesías”¹⁶. Pero como Dios es el que opera los ministerios: puede operarlo ahí en la persona, puede operarlo en el próximo.

Cuando Juan estaba preso, él desde ahí no podía hacer nada¹⁷. Sí podía hablar, mandar a preguntar; pero Jesús estaba ministrando ya. Cuando… y estaba atrapado ahí, no podía hacer nada, estaba en la cárcel; en ese momento era: la cárcel.

Y el hermano Branham cuando tuvo el accidente él estuvo atrapado en el carro sin moverse, no podía hacer nada¹⁸; llegó a ministrar la Palabra en ciertas cosas, como ponerle la mano a la esposa, estaba muerta, él ahí la revivió; pero estaba atrapado¹⁹; y el que estaba ministrando de pie era José.

Y el hermano William estaba atrapado en ese cuerpo sin poder ministrar; así como… saliendo de la casa él no podía hacerlo, no podía ministrar, desde ahí limitado; pero había alguien que estaba ministrando.

¡Mira qué cosa tan tremenda! Cómo todos esos eventos estaban siendo un reflejo y tipificando ese que iba a venir. Y como se recorren siete etapas…

Miren, allá, terminando la Ley, Juan llegó hasta cierto sitio para presentar y precursar. En el tiempo de la Gracia estuvo el hermano Branham en la séptima edad para precursar. Pero los dos llegaron hasta un punto en donde llegó que estaban y no podían hacer nada: atrapados en un… en los sistemas del mundo; por ejemplo: la cárcel; el hermano Branham en un accidente.

Y te vas a la Dispensación del Reino: se corren siete etapas, y en la séptima ese Arcángel Gabriel viene anunciando…: [WMB] “Anunciaste la Primera Venida, anunciarás la Segunda”; viene como precursor [(WSS) «precursará»]²⁰.

Y tú dices eso y te caen arriba; pero cumple también eso: atrapado también con este reino del diablo que introdujo la muerte allí en el…, y él estaba atrapado en ese cuerpo allí. Cuando él muchas veces decía: [WSS] “¡Tanto trabajo y mira! Mira cómo… así como estoy yo”, decía él; imagínate. Pero era lo mismo: se estaba repitiendo exactamente lo mismo.

Ahí está un poquito más explicado, vamos a decir, este… desmenuzado. (¡Eso fue ahora mismo, mira!): ¡Qué cosa tan tremenda!, cómo todo al final de cada dispensación ocurrió lo mismo. Y al final de la Dispensación de la Gracia… Recuerda que la Dispensación del Reino tiene ese entrelace en esas siete etapas; y por eso volvieron los bautismos ¿ve? Fue restaurado.

En las siete edades empezaron con bautismo, se dejó de bautizar, y el hermano Branham lo restauró. En la Dispensación del Reino se empezó con bautismos en el 74, se dejó de bautizar, tuvo unas etapas, y al final ¿quién lo restauró? Elías restaurando, que es el Arcángel Gabriel.

Pero ¿ve?, uno no puede enfocarse: “No, es que este, el ministerio está ahí”. Dios es el que opera los ministerios y los puede operar cuando Él quiera y desea.

—“No, que dicen ahora: un sexto Elías”.

Pero ¡si él fue el que lo escribió ahí!²¹, ¡no fui yo!

—“Que salieron ahora con…”.

No salí… ¡fue él mismo! Y no se dan cuenta que están batallando con la misma Palabra; están batallando con el mismo que ellos dicen que creen.

Y ¡claro!, si tú lo miras de cierta forma… ¿No puso hace poco?, leí que lo pone como la edad número 9 arriba, en la Pirámide²², si contamos los apóstoles.

Hay otro lugar donde él dice, cuenta a Jesús, cuenta a Pedro, cuenta a Pablo; y cuando vienes a ver, viene a ser ahora el 10. Como ves allá el número 10: Enoc, de la generación²³…

¿Ves que tú…? ¡Uno no puede limitarse! a…, no puede uno encerrarse a los números y a que tiene que ser así. Dios es infinito, y Él puede… todo lo coloca y lo pone a la forma que Él ya lo tiene en Su Programa.

Pero si él no volvía… ¿Por qué él decía: [WSS] “El pueblo no está listo”? Porque si llega Dios a cumplir todo cuando él se fue… Por eso él decía: [WSS] “Yo no me podía presentar solo en la Cena de las Bodas del Cordero, y dejar al pueblo pasar por la gran tribulación”²⁴.

Miren el amor de él al pueblo: pide más tiempo, se le concede…; lo que no se le concedió a Moisés allá. Pero como él fue el que hizo lo que hizo, a él no se le concedió; a él; al hermano William sí. En ese caso ahí cumple él esa parte de Moisés.

Nació en 1940; bueno, mensajero dispensacional: 1940. Todas las Escrituras tienen múltiples cumplimientos. No era para él… El Programa Divino era para que él estuviera en toda la dispensación; porque la Segunda Venida no era para ser crucificada. Y tampoco iba a ser una muerte… Aunque eso tenía algo que iba a ocurrir más adelante con los Dos Olivos, pero no tenía que ver con el cumplimiento de esa muerte que reflejó allá Moisés hiriendo la roca²⁵.

Si él se quedaba vivo, para comprender el misterio de la Venida del Hijo del Hombre con Sus Ángeles iba a ser… Número 1: Dios no tiene dos profetas mayores al mismo tiempo. Y como a los Dos Olivos le va a pasar lo que le va a pasar, y eso no era lo que le iba a pasar a él (ese tipo y figura), entonces Dios viene y se tiene que llevar al mensajero. Y queda solo entonces esos ministerios (que es lo que va a ocurrir). Pero tenía que regresar para dejarle el Título; y ahí sí cada uno se está comiendo ese Título.

Y las amarguras…, porque nos las está…, ya no es dejarlo ahí. Y se sale y se va, por la cajita que estaba allí arriba; ya eso lo retenemos nosotros en cada uno de nosotros.

Por eso cuando van a decirle:

—“Dame de eso”, y empiezan a tocar.

Y uno:

—“No. Vete y busca tú. Yo no quiero que me falte a mí. Esa Miel yo no te la voy a dar”.

Mira cómo se va sellando en cada cajita, que somos nosotros; porque somos Templo de Dios. Él está vertiendo esa Miel; y no la dejamos salir de acá.

Las vírgenes fatuas van a querer también, pero no. Y muchos de los de aquí van a estar después, cuando vean todo lo que… el producto, el resultado de lo que comimos: tienen que verlo, tienen que ver cómo es que todo eso ya después se va a mostrar en una forma grande en el cuartito; pero nosotros como cuartito, como templo, también vamos a tener ese poder.

—“Todo eso era para que pasara eso ¡y yo no aproveché! ¡Dame!”.
—“Vete a los libros, vete”.

Ya no va a haber tiempo.

El tiempo donde Dios nos ha dado a comer de esto rápido es ahora. Como estaban comiendo el cordero en la noche: tenían que comérselo a prisa; la muerte estaba – iba a venir²⁶.

Y el mundo ahora está en tinieblas; y hay que comernos esto rápido, porque la gran tribulación ya está por llegar. Ya va a surgir algo, de un momento a otro, que va a producir esa apretura; pero ya tenemos que tener nosotros ese Título de Propiedad en nosotros completo.

No pueden decir:

—“No, que ya yo lo tenía desde el setenta y pico; ya él me lo dio”.
—“¿Y por qué estás todavía con ese cuerpo?”.

No puede uno limitar las cosas que Dios va a hacer con nosotros como escogidos, limitarlo a las interpretaciones de nosotros. Tiene uno que dejar que Dios obre en nuestras vidas, y no ser mezquinos con Dios en Su Obra, poniéndose como que uno sabe más que Dios.

Se le olvidó a Dios este último tramo, y hay que esperar ahora por Él (!). ¡Él es el que está esperando por nosotros! Él siempre ha estado listo.

Él tenía a Moisés listo allí ya para libertar al pueblo. “No, espérate, Moisés… Un momentito. Están todavía muy comoditos allí. Cuando ellos clamen, Yo voy a escuchar”. Y así fue. Ya Dios tenía el hombre listo.

Pero no es porque uno se crea que conoce más, porque tiene más conocimiento del Mensaje, y va a decir: “No. Eso no es así”. Automáticamente está despreciando el Programa Divino.

Una Obra tan grande que Dios ha hecho, y que a última hora: Se le olvidó a Dios terminar el tramo final (!), el tramo más importante del Programa Divino.

—“Vamos a esperar entonces a que venga otra vez nuevamente él y nos diga; y se pare allí y predique”.

Así todo el mundo creía. Entonces tendría Dios que… Hay una parte donde él dice: [WMB] “Tendría Dios que pedirle disculpas a Sodoma y Gomorra”²⁷, algo así. Hay que ver todo el contexto, porque es algo bien tremendo.

Si Dios no cumple algo como Él lo tiene en Su Programa, entonces tendría que irse para el pasado y buscar todas las ocasiones donde pasó lo mismo. Estuvieran todavía… si fuera así, estuvieran todavía ahí frente al… antes de la tierra prometida allí estuvieran esperando todavía a Moisés.

No se puede estancar uno en la revelación, ni estancarse uno en el Programa Divino; porque todo sigue. Y esta parte de subir y de salir, mira, ayer lo leímos: [WSS] “La Tercera Etapa es el llamado a los 144.000, y el llamado de los escogidos a subir a la Piedra Angular”²⁸; algo así lo dice. Mira dónde también esa Escritura tiene cumplimiento, porque es un llamado de una edad que ya terminó.

Si el mensajero se fue, pues tiene que haber otro paso, tiene que haber algo más que Dios tiene que estar obrando.

Y la Piedra Angular, que es la Edad de Oro, que es la edad donde está vertiéndose toda esa Miel, que es el contenido del Libro: el que no esté recibiéndolo eso en el cacharro, o en el…, vamos a decir, en… él dijo [WMB] “una cajita de piedra”; el que no esté ahí recibiendo eso, por consiguiente está menospreciando, nada más y nada menos, lo que les va a dar la Fe de Rapto.

Y como se queda en la séptima edad: allí no hay nada. Allí lo que hay luego es…, él dice que [WMB] “la séptima edad es el trono de Satanás”²⁹, algo así. Ayer no lo teníamos a la mano para leerlo, pero desde ahí es donde él reina. Siempre llega hasta ahí, no puede pasar, no sube.

O sea que ya de ahí, lo próximo que va a recibir en ese cacharro son interpretaciones, ideas; y es todo lo que el diablo entonces va a estar metiéndole en la mente. Y ahí son las personas que se ponen a atacar, y van a atacar entonces la Obra. No se están dando cuenta que están cumpliendo Escrituras.

Porque, si tú te fijas, tiene que haber algo que Dios está haciendo; pero también tiene que haber un pueblo, o unos hermanos, o un grupo, que esté atacando eso. Punto. Y no se están viendo reflejados en eso.

Ven un pueblo gozoso, con un avivamiento; y ellos están molestos. Y tú los ves todos con esa bravura:

—“¡Urgh!, ¡urgh!”.
—“Pero ¿y por qué estás así?, si es un tiempo de alegría, de regocijo, de gozo. Nos vamos de aquí ya mismo. ¿Y estás peleando porque eso no puede ser así?. Ah, ¿entonces tú no te quieres ir?”.

O sea que no se dan cuenta que cumplen Escrituras. Y nosotros, cuando vemos eso, nos da tristeza…; porque son personas que uno aprecia, que uno… Como yo le decía a Axel hace poco: le da tristeza de uno haberlos hasta conocido. Muchos nacieron con uno, compartieron, pero a la misma vez…

Como cuando él me decía: [WSS] “Si tú ves que no hablan mal de ti…”, porque yo le – iba:

— [JBP] “Mira, me dijeron tal cosa”.
— [WSS] “Tranquilo”.

Ya después, parece que ya estaba tan… que yo le decía…

— [WSS] “Mira, Benjie, el día que no hablen de ti: preocúpate; algo anda mal”. [Risas].

Y ¡ay, cará!³⁰ Ya me tranquilicé. Ya ahora es: “Espérate, ¿quién…? ¿Hablaste mal de mí?”. O sea, como el hermano Branham nos decía: [WMB] “Todo está bien, Billy: el Mensaje, el mensajero…; pero hay algo que está mal: hay mucha gente siguiendo este Mensaje”³¹. ¡Adiós cará!, ¿pero no se supone que haya muchos?

O sea que nosotros, debe de llenarnos… Mira, se oye duro, se oye duro, pero nos llena de alegría que esas personas estén cumpliendo esas Escrituras. Y es duro decirlo, porque… Si no, entonces habría que preocuparse, porque ¿no era lo que estaba en el Programa Divino?, que se le iban a levantar en contra de la Obra de Dios. Y cuando uno ve eso: “Bueno…, vamos bien”.

Por eso es que, si uno pudiera hablar un poquito de más…; pero no puedo. Eso fue lo que le dijo el Ángel al hermano Branham: [WMB] “De esto no vas a decir nada a nadie”³².

No va a haber tampoco imitación, no va a haber tampoco personas manufacturadas, tampoco. Si uno pudiera hablar y darles, mostrar un poquito más, ya eso estuviera, imagínate: estuviera la fila aquí de gente pidiendo perdón. Si llegan a saber un poquito nada más, no hubiera tiempo… Es más, tuviéramos que estar nosotros acá…, la gente viniendo de los sitios. ¡De todos los países!: solamente hubiera unas actividades de perdón; si nada más se dieran cuenta lo que está pasando.

Pero como eso es una etapa. Cuando venga gente y todo eso, más bien es para gente que están ya predestinadas para dar la vida en la gran tribulación: van a venir arrepentidos, van a venir buscando de lo que vinieron a buscar las fatuas allí (las vírgenes durmientes); pero eran personas, como dice el hermano Branham: [WMB] “de buen corazón”³³.

A ellas sí les vamos a dar tiempo para ellas; a estos no. Dios ni siquiera…, aun teniéndolos ahí todo ese tiempo, ¿ve que no sacó un tiempo para todos ellos? No hubo misericordia para ¡ninguno de ellos!

Lo tuvieron ahí, tuvieron ahí en la… tuvieron el Manjar en la boca, ¡y lo que hicieron fue escupirlo y botarlo!

Eso es fuerte. Estuvimos dándole casi ahí… Mira, hasta en puré, porque mira que ha sido algo tan grande lo que Dios nos ha dado, que no hay ni que…

Uno decía: “Oye, ¿y tú tenías…?”.

—“Ya en el del viernes Él me contestó”.

Y ya es… Y es como si Dios mismo estuviera colocando en el corazón de cada persona ese clamor de conocer; y entonces… Eso no es aquí nada más; en diferentes lugares. Y aquel pide por algo, clama por algo el otro; y en algún mensaje sale.

—“¡Mira, Benjie!, yo que estaba en estos días pensando: pero ¿y cómo será esto entonces? Y ¡pum! Aclarado”.

Casi se le está dando ahí esa Comida digerida ahí casi. O sea, es cuestión de tragársela. Y muchos la escupen, como escupieron la Palabra allí: a Jesús. En ese tiempo donde le agarraron las barbas, le quitaron los pelos, lo escupieron³⁴; y eso representa todos los que escupen y le tratan de quitar la barba —en ese tipo, tipología—: menospreciando la Palabra de este tiempo.

Por eso no se le va a dar tiempo, oportunidad, para que vengan a una fila de oración ahí a pedir perdón. Ya para ellos lamentablemente no va a haber tiempo. Son, como yo decía: “Pedazos de carne caminando, porque ya están muertos espiritualmente”³⁵. Es triste decirlo, pero es así.

Porque mucho daño han estado haciendo. ¡Y lo que les falta!, porque tienen que cumplir toda la Escritura. Mucho daño han hecho al pueblo en este tiempo, y Dios no va a tener misericordia con ninguno de ellos; porque no han visto, no han identificado, dónde está la Palabra, dónde está el Verbo.

Por eso si se les llega a mostrar alguito, ahí puede ponerse uno en la parte de eso donde él escribe (y ellos creen): [WMB] “entonces habría que resucitar a los de Sodoma y Gomorra y pedirles perdón”. No conocieron el Día de Su Visitación.

Y ahora muchos no han entendido el tiempo de Visitación. Ahora a ellos no se les va a dar oportunidad de fila, ni de oración, ni de nada. Pero así está en el Programa, y uno debe de seguir firme.

Y todavía muchas cosas nos van a doler; pero esto es como dijo ayer³⁶: [WMB] “es individual”. Cuando le trajeron eso al hermano Branham: [WMB] “Hermano Branham, dijeron que si uno es creyente y está casado, y el otro no es creyente: ninguno hace el rapto, porque los dos son una sola carne”. Mira cómo ahí esa parte (vamos a decir) Dios no la…, o como la rompe (vamos a decir). Mira cómo tiene ese cumplimiento ahí de…: [WMB] “No. Esto es individual. Está escrito…”. Se va a la Escritura: “El uno será tomado de la cama y el otro será dejado”.

Y hay otra parte donde él dice que uno…; cuando es así, literalmente puede que se cumpla, pero también de distancia, que son personas que se conocen; algo así, hay una parte donde él dice.

Porque todo esto ahora es individual. No “porque Fulano o Fulano dice esto, pues yo voy a creer”.

Las diferentes ramas que se van levantando cuando muere un mensajero y va a otra etapa: esos mismos líderes son los que van desviando al pueblo cuando no quieren seguir la guianza divina. Y él es el que está (vamos a decir) con un grupo de personas por un lado… Aunque es individual en esa forma; al venir y denominacionalizarse, sin darse cuenta, empiezan a señalar pa’ atrás que la denominación es acá; y no se dan cuenta que son ellos.

Porque al salirse de la rama que le da y le vierte esa Agua de vida eterna, o sea, la Palabra, donde fluye…; cuando se cortan y viene a ser una rama fuera: eso ya es denominacionalismo. Y viene a ser él —el líder— responsable de ese grupo. Ya viene a ser una denominación más con un líder.

En nuestro tiempo nos ha dado la libertad Dios de: cada uno como templo de Dios; por eso es individual. El diablo trata de hacer organizaciones, y Dios nos liberta. Cada individuo entrando por la Puerta. Y todo es tan sencillo que la gente: eso es lo que los ciega; son “ciegos guías de ciegos”³⁷.

Pero es tan grande lo que nos ha tocado que ni siquiera uno ahora debe prestarle atención a nada de eso. Y vuelvo y digo: nos duele, pero ¿no le dijo allí Dios a Samuel? (creo que fue): “No llores más por Saúl”³⁸. O sea, ya llega un punto en donde Dios dice: “Ya”. O sea…

A Moisés también le dijo: “No me hables más de ese asunto”³⁹.

Hay cosas que uno debe de seguir para adelante; no prestarle atención y seguir. Déjalos allá en ese enredo.

Es un tiempo bien… en la forma en que Dios lo está haciendo, nadie se esperaba que todo iba a… Le sorprendió a todo el mundo.

Pero a los escogidos no les iba a sorprender: ellos sabían, y saben, que hay un Programa; y que no importa a quién (como lo que estábamos hablando) Dios hubiese escogido de uno de Sus redimidos para cumplirlo: íbamos a seguirlo a Él⁴⁰; porque es el cumplimiento de la Palabra la que importa.

Y la Tercera Etapa, como era algo que no estaba escrita… En cierto sentido; porque estaba escrita en sus libros; porque hay muchas cosas ahí que él las dejó ahí escritas para que ahora se abriera.

Yo les decía ayer en casa: “Si un ministro llega a coger eso, se pusiera a beneficiarse de eso…”; porque ¿no pasó cuando el Nombre, allá? Lo supieron, y se pusieron para su propio beneficio⁴¹.

Si llegan a agarrar todo lo que hay ahí escrito: número uno: algunos se pudieran – haber hablado abiertamente cosas… No iba a ser así, no era la persona, pero si hubiese llegado a ocurrir, esto hubiese sido un… ¡Imagínate! Pero como Dios se cuidó de eso…, de que fuera en el momento indicado y la persona indicada, el lugar indicado, para ir trayendo todo eso a medida que Dios iba abriendo todo.

Y si tú te buscas el del 25 (que fue el de ayer), el del año pasado, y tú te vas a uno del de agosto u octubre: mira cómo todo ha ido creciendo.

Y hay una conversación con una persona (me la mandaron, un screenshot [captura de pantalla]), que el 26 de diciembre él me escribió [2021]: “¡Qué tremendo todo lo que se habló ahí!”. Y yo le escribo: [JBP] “¡Hay tanto que yo pudiera decir! (Algo así), pero vamos poco a poco”. ¡Desde el 25! Y mira cómo… Todo eso queda registrado porque ya… Y ahí Dios no me había abierto todo el cuadro. Pero mira cómo fue Dios fue guiando todo…, ahí con las luchas, con la batalla.

Lo mismo que pasó en el setenta y pico, 74, la batalla que hubo allí… fuerte. Que me acuerdo que era pequeño escuchando a Julio que le decía: [WSS] “¿Te acuerdas, Julio?” (le decía William a Julio), que él quería… Y él (William) le dijo: [WSS] “No, así no”. Porque se montó en el carro, y tratando de…, no sé si tenía la bala arriba y se disparó, y ahí fue que se le llevó el dedo. Por eso Julio tenía el dedo, este, torcido aquí para un lado. Pero no era la forma, no es la manera.

Lo mismo que se van a dejar usar los que van a hacer aquello.

Pero eso de ese tiempo, él le dijo: [WSS] “Déjalo, que la Palabra se va a encargar de eso”. Y mira cómo… Fue una lucha grande para el hermano William ese tiempo.

Siempre en los comienzos de una dispensación hay luchas. Y fíjate que ahora ¿no ha habido una lucha?, con los líderes principalmente. El pueblo queriendo recibirlo y muchos están ahí aguantándolo⁴². [WMB] “No entran ni dejan entrar, los líderes”⁴³.

Pero ya todo este tiempo ha sido un tiempo de probar a la gente: a ver lo que hay en el corazón. Y todavía no sabemos hasta dónde todavía falte un poco más; porque todavía queda gente hipócrita dentro: todavía quedan hermanos, ministros y todo; gente que están ahí por mantenerse, y otros por alguna conveniencia; pero el tiempo va diciendo.

Empiezan a decir: “Mi Señor se tarda”, y empieza a golpear a sus consiervos. Mira cómo esa Escritura ahí se cumple: “Mi Señor se tarda”⁴⁴; así le dirían: “No, el hermano William no viene, espérate”. Y sin darse cuenta, como se retarda, para ellos, pues (y no saben que ya está entre medio de ellos)…, y se tarda, empiezan a atacar entonces y a hablar mal; empieza a golpear a sus consiervos. Consiervo porque es un hermano.

Por eso cuando el domingo dice (y hay una parte)… a ellos; el hermano Branham se refiere a los que se ayudan; pero esa anécdota es muy… Si uno la detalla, cuando él dice que: [WMB] “No, yo no me llevo con este por esto, por esto, por eso, por esto, por esto; pero que salga afuera y que le hagan algo a él, (dice): eso casi te rompe el pecho”⁴⁵. ¿Por qué? ¡Porque es parte de ti!

Aunque esté bien al fooondo ese amor, bien al fondo; pero allí hay esa chispa que te quema y te dice: “Que se metan con él, porque yo…”. Pero acá, en la Iglesia, en la Casa de Dios, ¡lo estasaja!⁴⁶: “No, ese yo no…; no me gusta este, no…”.

Todo se está poniendo tan claro, que por eso mismo a veces uno dice: “Pero imposible que no lo puedan ver”.

Mira, ese mensaje de ayer… ¡Eso está más claro que el agua! Y aun así todavía no lo entienden. Porque como me decía el hermano Miguel: [MBM] “Es que si no van a hacer el rapto, ¿cómo lo van a entender?”.

Y tú les dices a ellos que no van a hacer el rapto y nada; y ellos dicen: “Ah, no. Ya Benjie está diciendo… El hermano William decía que todos vamos a hacer el rapto”.

Sí, pero ahora es el Ángel que hace la segregación, que son los ministerios de Moisés y Elías.

Ahora no es todos los que van a hacer el rapto; ahora es esa gente con percepción profética la que va a hacer el rapto. No son todos.

El hermano William los trajo todos: esa gran pesca (grande) donde empezó a atraer a los peces pequeños; estaban todos ahí con él. Pero en el último jalón (luego del segundo, en el último), esa pesca es ahora: los peces grandes.

Y esa pesca la quiso hacer el hermano Branham.

La quiso hacer también en parte…, aunque él los recogió a todos, pero ya ese último jalón lo quería hacer aquí el hermano William; pero no le correspondía ahí en esa etapa.

Era ahora: cuando se llama y se jala, ese último jalón, que es en una Carpa. Y todo se está cumpliendo: “Cuando eso ocurra…”. Y sí, ya está ocurriendo.

Los demás se van a ir quedando en las aguas denominacionales. No van a ser sacadas de ahí, no van a ser sacadas de la séptima edad de la Dispensación del Reino, de esa séptima edad; son dejadas ahí en el agua, en ese lago que representa – representó allí donde le mostró el Ángel.

Pero estos otros son sacados y son colocados en la Piedra Angular, en la Edad de Oro: en donde va a ocurrir el rapto, el arrebatamiento; en donde Dios va a bajar, va a venir la visita: va a ser ahí.

No pueden esperar en una edad donde el mensajero se fue, a esperar ahí la visita de la sexta dimensión. La visita va a ser es en la Piedra Angular; y el que no esté ahí arriba no la va a ver. Van a decir:

—“Pero mira, mira a Fulano ahí”.
—“¿Dónde? Yo no lo veo”.
—“¡Míralo ahí!”.

¿Ve? Va a ser así. Va a ser de una manera del común.

—“Pero mira, ¡allí está Fulano! ¡Adiós, mira a Humberto! ¡Adiós, mira a Rondón! ¡Mira a Menéndez!”.

Y cuando venga a…:

—“Pero yo no los veo…”.

Ellos se van a dar cuenta que se van a quedar. Algo va a pasar en ese tiempo en que esa fe para ellos, para luego dar sus vidas, tienen que ellos obtenerla; porque no recibieron ese Aceite.

De seguro muchos de los de aquí. Uno no desea que se pierdan, pero hay que ver hasta dónde la persona ha cruzado la línea: a esos no va a haber misericordia para nada. Imposible que haya misericordia para alguien que haya blasfemado al Espíritu Santo.

Porque si llegó un tiempo en donde esa etapa se acabó, y Dios cerró… Eso no lo podemos detallar cuándo es; pero sí, ya hay un tiempo que se ve que tuvo que haber ocurrido.

Porque ya a estas alturas el que todavía sigue…: no hay forma de dar marcha atrás. ¡Porque así cualquiera! Esos todavía a estas alturas van a esperar a que vean las visiones y los milagros para entonces creer. No se va a esperar a la Carpa para creer, o sea, al cumplimiento de eso.

Incluso cuando él venía, siempre él lo que comentaba: [WSS] “Esto se te va a hacer pequeño”. Ya él mostrando que era en un tiempo futuro y que no iba a estar él. [WSS] “Esto se te va a hacer pequeño”.

Incluso cuando habló allí, habló de espaldas; tampoco… Mira la reverencia y la… (vamos a decir) el respeto de él, del ministerio que iba a estar allí. Ni siquiera habló hacia allá. Habló hacia los hermanos, a los trabajadores, y se bajó y se fue.

No era él para estar aquí en su cuerpo físico obrando y hablando y trayendo la Enseñanza. Pero ¡sí es él!: en la Palabra: porque el Mensaje y el mensajero es lo mismo⁴⁷. ¡Y cómo él nos ha ayudado para seguir esa misma línea!

Mira, uno pudiera tener computadoras y todo, pero la forma que Dios usó para traer todo este Mensaje es la misma forma que está usando ahora en esta recta final: los libros.

Y cualquiera diría: “Pero… Oye, pero eso se tarda mucho”.

Yo llevo un año y pico (un poco más), todo eso pasándolo a libreta: cada mensaje, cada… El libro de Citas, todo lo que él escribió: ya voy terminando casi (me falta poco).

Lo mismo que él escribió en sus libros lo estoy escribiendo yo en libreta; o sea que (vamos a decir) estoy pasando…; y llevo un año. Imagínate, él lleva desde el sesenta y pico. Hay anotaciones allí del 65, imagínate, 66, que él ha estado escribiendo todos esos años los estudios. Y yo estoy aprovechando en libretas todo lo que es el libro de Citas, Edades, Sellos; todos los escritos; que ya se han ido dando algunos en este año; pero eso es…

O sea que, todo lo que Dios está haciendo ahora es la continuación de lo que él vino haciendo hasta que Dios le dijo: “Hasta aquí”.

Y la fecha que ya él había escrito (porque él sabía que se iba)… después de lo de Argentina ya él tenía allí unas anotaciones en uno de los estudios. Yo veo en uno de esos de “HA NACIDO EL REY” (creo que fue aquí predicado, después de lo de Argentina), ahí había escrito esa fecha de [WSS] «2017». Y la de [WSS] «2019», luego de cumplirse ahora algo en estos días.

Ahora, hay que mirar que lo mismo que ocurrió con los siete días luego que partió el hermano Branham… o sea, luego del accidente (corrijo); luego del accidente fueron siete días después. Y hay que ver ahí…; porque eso está escrito también allí, ese tiempo, lo que representa allí, de esa muerte del hermano Branham siete días después.

Pero todo eso está ya… Por eso él dice ahí: [WMB] “No fallará ni por un minuto”⁴⁸, no fallará. Está todo exacto.

Incluso también la vida de los mensajeros también uno tiene que ver: las edades, la edad que va – que tienen, dónde se fueron reflejando.

Porque el Arcángel allí, la vez que le dijo: “No tengas miedo en tomar a tu esposa (desposada era, no estaba casado), a María”⁴⁹, José tenía 45 años.

—“Ven, no temas tomarla a ella”: No temas tomar a la Iglesia.

Ahí hay algo bien tremendo. Él no habló nunca de José, descendiente de David; pero ahí representó eso que ocurrió acá cuando yo tenía 45 años, con él. Que fue en el 2019, cuando él se fue. La última aparición de Gabriel en ese momento, así, fue a José.

Primero fue a Zacarías; pero ya le había dicho algo, había ocurrido algo con Elisabet. Le apareció a Zacarías, luego a María (cuando estaba en la séptima edad); luego le aparece a María y por último a José, y se va.

Y ahí, cuando él estuvo en esos días, el hermano Branham dice…, ahí fue que escribió que José tenía 45 años⁵⁰. Y en esa fecha yo tenía 45 años, cuando él en el hospital me dijo ciertas cosas. ¿Ve que cómo todo se cumple? Son tipos y figuras que vienen a cumplirse acá.

Y lo mismo, más o menos así. Dejándome la Iglesia-Novia donde iba a nacer ese Hijo, por medio de ese que estaba dejando allí el ministerio. Es algo bien tremendo todo ese cuadro que ocurrió allí.

Por eso él decía: [WMB] “La Novia está embarazada para dar a luz ese Hijo”⁵¹.

Y ese Hijo ya lo tenía Dios, había nacido, ya había estado ahí con ellos, tenía una trayectoria y tenía todo.

Y ahora, estas fechas próximas son importantes, porque a la edad de 50 años el hermano Branham visitó el Paraíso. O sea que algo se va a mover por esos días.

Y hay que recordar que los calendarios tienen 5 días y cuarto [¼] de atraso; y hay que también sumar los 9 meses del vientre. Todo eso él lo tiene allí.

O sea que cuando tú vienes a ver, todo se va (como decimos) jalando, acortando, acortando; y cuando vienes a ver: ¿Cuándo en realidad es que está empezando el ciclo del Año 50? Posiblemente no va a ser esperar el año 2024 para entrar al Año 50 (¡Ándale! Dije la fecha); pero, o sea, a cumplir esa edad (porque pueden sacarlo, saben cuándo yo nací); pero puede ser antes, algo…, ¡como puede ser después! Uno no tiene, no puede, en fechas no puede uno ajustarse. Pero hay que estar vigilando bien y ver, estar en la expectativa, como lo estuvo Eliseo con Elías⁵²:

—“Mira, se van a llevar a tu señor”.
—“¡Shh, cállate! Yo sé. Estaba pendiente. No me distraigas”.

¿Por qué? Porque aquel del cual le iba a dar esa doble porción se iba a ir; por lo tanto, había que estar pendiente a Elías para recibir esa doble porción. Y los escogidos tienen que estar pendientes a esos ministerios para que les dé la doble porción del cuerpo eterno, o sea, esa segunda parte.

No puede… ¿Están hablando por allá? “¡Shh!… ¡déjalos!”. No le hagan caso. ¿Ve? Sigan enfocados y mirando al ministerio, porque de un momento a otro puede estar ocurriendo algo.

Vamos a estar viendo las cosas cómo se van a ir moviendo; pero como todo es en un mismo entrelace. En… que si una… ¿las tormentas?, es normal que ocurra una tormenta; ¿los terremotos?, ya están también siendo como algo normal. Y como todo va a ser así entre medio de algo normal; pero es Dios obrando entre medio de todo eso para llevarse a Su Novia.

Antes de eso sabemos que van a ocurrir una serie de eventos. Pero hay algo que no se ha hablado de cuándo es que ocurre algo; y lo están pensando que es en cierto momento, y se van a dar cuenta después que no era como lo habían pensado. O sea que: colocar las piezas en el lugar donde es, eso le corresponde a Dios; al creyente: creerlas.

Pero van a haber muchas sorpresas de cómo se van a estar cumpliendo las cosas. El pueblo está ya preparándose, recibiendo la Fe de Rapto. Se van, y: “¡Adiós! Pero ¿no se supone que haya un rapto?”. Va a ser algo tan así, como decimos, sutil, que va a estar ocurriendo todo.

El estar pendiente a Elías allí, dependía de que Eliseo obtuviera esa doble porción. La recibe. Ahí es donde en eso (en eso de ahí de los muchachos), cuando él les dijo lo que iba a hacer, vean cómo él enseguida fue e hizo lo que hizo Elías: golpeó con el manto⁵³. O sea, lo que hizo fue empezar a abrir la Palabra. El agua representa la Palabra. Exactamente lo que hizo Elías lo continuó Eliseo: abriendo la Palabra.

¿Qué es lo que ha estado ocurriendo ahora? Abriendo la Palabra, abriendo el Mensaje, dando a conocer estos misterios escondidos, que es lo que tiene y contiene la Fe de Rapto, la Fe de Transformación.

Pero como Dios así lo tiene en una manera tan sencilla: se les pasó por alto, se les pasó por encima a aquellos que pensaban que era de cierta manera. Se quedaron con los tipos y figuras, y no pasaron a la realidad, no pasaron a lo que era aquello de lo cual él habló. Vinieron a ser seguidores de emociones y de…; no seguidores de la Palabra.

—“No, yo creo lo que él trajo”.

Si hubieses creído lo que él trajo estuvieras creyendo ahora en este tiempo.

La etapa de la segregación es la etapa más importante para los escogidos; porque es donde te sacan del forro, te presentan al Sol para madurar; y no puede haber nada que estorbe que ese Sol te madure. Por eso todas las cosas que estorban para que uno madure como trigo, debe uno quitarlo.

¿Uno pensar en un tiempito tan corto de felicidad comparado con un cuerpo eterno y glorificado? No tiene… ¡no es negocio!, vamos a decir.

No decir: “No, yo hago esto, yo voy a seguir haciendo mi vida mundana, yo voy a seguir haciendo esto otro, esto otro; y aun así yo voy a ser transformado”.

No. Tiene que haber un tiempo de preparación. ¿No entró el último a última hora en la Cruz? Es más, llegó primero allá⁵⁴. O sea que Dios dejó un tiempo para eso: para corregir todo, y no poner la mira en las cosas terrenales sino en las cosas celestiales.

Hay una parte donde él di-… yo lo retraté, que él decía que: [WSS] «Mirar las cosas celestiales…» (¿dónde fue?). ¡Míralo aquí! Él está hablando:

San Lucas 21

²⁸ Cuando estas cosas comiencen a suceder, erguíos y levantad vuestra cabeza, porque vuestra redención está cerca.

[JBP] Y él escribe allí: [WSS] «De las cosas terrenas, a las cosas de Dios. Despertad, levanta tu cabeza de la almohada y la cama».

O sea, de las cosas terrenales; de… no está diciendo que no vayamos a dormir, pero… ¡Hasta eso! Que nada nos retenga, sino que prosigamos a la meta por la cual hemos sido llevados hasta aquí. Y es proseguir, no es estancarnos; es seguir hacia esa meta, que es la transformación; es seguir el Arca, es seguir la guianza divina.

No es seguir un hombre. Aquí no estamos siguiendo a un hombre. Estamos siguiendo es a Dios en Su Programa. Es lo que Él prometió; y Él no nos va a defraudar.

Ahora, si le damos la espalda… y nos creemos que sabemos más… y decimos y combatimos con la misma Palabra (porque eso es lo que hacen). ¿Qué hace el diablo? ¿Qué hizo el diablo allí con Eva? “No, Él no dijo que vas a morir; órale a Dios que te abra los ojos y te dé más entendimiento”⁵⁵. ¿Ve? Usó la misma Palabra.

—“Es que él dijo que iba a cumplir eso, él dijo que era él, él dijo que no había más mensajeros”.

Así mismo te lo… Y tú estás… Un hermano me dijo: “Mira, tú estás un ratito con ellos, y poquito más y crees”; porque tienen una labia y una forma de…

Es que así es el diablo: es bien astuto. El hombre más labioso es el diablo. ¡Y una astucia que tiene!, para coger la Palabra; y cuando tú miras…:

—“Pero si es la Palabra. ¡Claro que sí!”.
—“No, que él dice que no hay mensajeros”.
—“Sí, claro que sí”.

Hasta ahí. Porque en la Piedra Angular Él tiene uno.

—“No”. Porque como no avanzan, piensan que es hasta donde ellos dicen.
—“Es que él dijo en el ochenta y pico…”.

Hay un extracto que están poniendo mucho: que él le preguntó al Señor si había alguien más. En ese tiempo ¡claro que no había más nadie!; porque no le iba a ser revelado a él el Séptimo Sello, el misterio del Séptimo Sello.

Si le llega a abrir el Séptimo Sello allí, y él lo predica, da a conocer todo: Lo primero que iban a hacer era a echar a un lado al hermano William; e iban a empezar a buscar quién era ese otro hombre.

No podía ser hablado abiertamente el Séptimo Sello; y él lo que hizo fue que lo selló allí. Y todo el mundo dijo: “Ah, pues es él entonces. Vamos a quedarnos quietos”.

Los que hacen eso no saben la lucha que había allí, la batalla, en ese tiempo. Y se van a encontrar como Datán, Coré y Abiram: en contra del mensajero del tiempo en que Dios los ha colocado ahora; que han pasado (así como pasó la simiente allí en el arca de Noé)⁵⁶, han pasado también de esa edad y están aquí. Se van a dar cuenta que son los que están estorbando el Programa Divino; y es donde los Ángeles hacen esa separación. Ahí es donde se cumple: los Ángeles segadores sacarán ahora el trigo [la cizaña]⁵⁷.

No se podía hacer en las edades, porque podían arrancar… arrancando la cizaña, podía arrancar el trigo. Ahora es que se está haciendo esa segregación.

Porque fíjate que el primero que hace el jaloncito —y ese jalón después que…; ahí está listo para pescar, y hala pa’ pescarlo— es Dios con la Palabra.

Y por otro lado está la cizaña; porque dice el hermano Branham en Las Edades que [WMB] “la cizaña será juntada; y cuando eso ocurra, el rapto ocurrirá”⁵⁸. O sea que por un lado es Dios juntando a los peces grandes, y por otro lado el enemigo a la cizaña; y todo eso se refleja también dentro de la Iglesia.

Tú ves cómo se van uniendo ya los grupos. Mira, aquel se va….

El hermano William tantas veces diciendo que se conecten, tengan antenas y tengan todo; y ministros no poniendo ahora: “No nos vamos a conectar, no vamos a escuchar nada”; en contra de lo que el mensajero habló.

Y podrán decir: “No, es que después cuando ocurra eso entonces nos vamos a conectar”. Tremenda responsabilidad se ha metido ese ministro al llevar a ese pueblo a la gran tribulación; los está preparando para la gran tribulación.

Y después ellos le van a pedir cuentas al ministro. ¡Ay de ese ministro!, y de todos aquellos que hayan tirado por el suelo la palabra del hermano William, de que dijo: [WSS] “Tengan las antenas, vayan preparándose desde ya”.

Incluso hasta dijo que el devocional lo iban a seguir desde ahí⁵⁹.

No es que lo van a hacer desde ahora; pueden tener su devocional. Eso a medida va entrando. De seguro es que como van a haber unas pausas, y… Vamos a dejarlo; pero todo eso va a entrar solito. Pero si hasta eso van a seguir, ¿cómo vas a quitarle?

—“No, porque como no me gusta el que está allí”.

¡Ahora! Te regalan un carro y: “Ah no, no me gusta porque ese color no me gusta”.

Te dan ahí la oportunidad del tiempo de prepararte, y al final: “No, porque como el que está allí no me gusta; la forma de él es… ¡Todo lo que yo sé de él!”.

Pues hay que tener cuidado, porque si te pones a sacar las cosas que ya esa persona las echó en la Sangre cuando hubo oportunidad…; y el único que tiene esos archivos es el diablo. Y tiene la manera la persona de sacar: con el sentido del recuerdo; los saca, los expone; y después cuando va otra vez a devolver el archivo:

—“¡Adiós!, pero la puerta de este… ¡Mira, ábreme!, que voy a guardar este archivo que acabo de sacar de ahí”.
—“Eh, no. Está cerrada la puerta”.

Y cuando viene la policía te encuentra con el…

—“¿Y de dónde tú sacaste eso? Eso no te corresponde a ti, eso le pertenece a esa oficina. ¿Qué tú haces con eso?”.

Atado de pies y de manos y para la gran tribulación.

O sea, no hay manera después de ir al Trono de Intercesión para entregar eso para atrás; porque es la única vía que hay para regresar otra vez eso al diablo. La única vía que hay para regresar pecados que pertenecen al diablo era Cristo.

Y los escogidos saben la forma —en este tiempo— de cómo hacer para que Dios los ayude en este tramo final: porque la misericordia está en los Dos Olivos.

Siempre hay una forma; pero para ese que no cree en eso… ¿cómo va a ir…?

—“No, yo voy a ir al Trono allá a pedir perdón”.

Porque para empezar son tan arrogantes y tan cerrados de mente que dicen: “Yo como…”. Se creen, parece, los… como dicen, ‘la reina de Saba’. “Yo puedo exponer todo eso, los errores de él, porque fue él, no fui yo”. No, ahora están en tus manos; y Dios demandará esa sangre como demandó de Pilato la Sangre de Jesús.

Eso de estar pasándolo (lo leímos)⁶⁰… No, eso va a regresar otra vez a ti.

Y en este tiempo no va a haber la forma de tú regresarlos allá; porque tú dices:

—“No. Los puse allá”.
—“No. Se te regresó”.
—“¿Y por qué?”.

Porque ya el Trono es de Juicio, ya es Juez; ya no hay forma.

El diablo es… en este tiempo, es una persona que no le gusta que sea expuesto (como lo leímos)⁶¹, no le gusta que lo expongan, o sea, que lo descubran. ¿Y cómo se está descubriendo? Por las acciones que está haciendo a través de los seres humanos.

Por eso yo les decía⁶²: [JBP] “No es contra el cuerpo, no es contra la persona; es contra el espíritu que está en esa persona”. “Potestades de maldad (así dice, algo así), del reino de maldad”⁶³.

No se dan cuenta que están siendo usados por el enemigo en este tiempo; y por eso pues dicen:

—“No, ‘este’ no me gusta, ‘este’ tiene muchos defectos”.

¿Y quién te ha dicho a ti que tiene defectos? ¿Tú lo has chequeado bien? ¿Tú eres quién para decir si tiene o no?

Hay que tener mucho cuidado, porque se van a estar topando con el mismo que se topó Sara allí, y le mintió: con Elohim⁶⁴.

Es un tiempo en donde Dios está mirando a la Tierra ya no a través de la Sangre, sino a través de los Binoculares: que son Moisés y Elías. Por eso es donde único hay misericordia, para los escogidos que lo aceptan; porque Dios los mira a través de ellos dos. Así como miraba a la Tierra a través de Jesús, y no trajo el juicio divino.

Hace rato el mundo se merecía la gran tribulación; pero por causa de Cristo en el Trono de Intercesión, Él miraba a la Tierra a través de la Sangre. Y ahora, al no estar, mira a la Tierra, pero cuando mira es como cuando uno se pone los binoculares y va a estar mirando lo que enfoca. Puede estar ocurriendo aquí un montón de cosas, pero cuando mira, Él enfoca a los escogidos y dice: “Espérate, estos los voy a proteger. Ya tienen esa Sangre en el dintel aplicada”. Pero es a través de ellos que los está mirando.

Aquellos podrán decir: “Pero yo tengo también la Sangre, porque yo creo en el Señor Jesucristo, yo lo acepté y todo”. Sí, pero esa parte era cuando Él iba a salir del Trono de Intercesión. Y tú no puedes decir que… tú te levantas por la mañana y te acuestas por la tarde, y algo siempre tiene una raíz o algo, del mal, por el cual uno tiene que decirle al Señor: “No fue mi intención hacerlo”. ¡Estamos en estos cuerpos! ¡Eso es lo que todavía demuestra que estamos en estos cuerpos!: porque faltamos.

Ahora, ¿cómo es ese mecanismo?, ¿cómo lo hacemos, para que Dios nos siga mirando limpios? La Sangre está en la Iglesia, en los escogidos, está en nosotros; pero tiene que ser vista de una manera. Y la manera que Dios la ve ahora es a través de los Dos Olivos. Y si no crees en los Dos Olivos: no tienes la Sangre aplicada entonces.

Ese misterio, cuando se vaya así… abriendo, hay que seguir eso para buscar muchos sitios donde habla de todo eso; podemos abundar: cómo es que uno está limpio delante de Dios aun estando en estos cuerpos.

Si no crees en los Dos Olivos, esa es la… [WSS] «Moisés y Elías: el que los recibe, recibe misericordia»⁶⁵: la última misericordia de Dios, por última vez.

Por eso él dice: [WMB] “Estuvieron en cultos como este. Se les predicó y se les habló todo lo que venía. Ellos sabían el castigo que les esperaba. Despreciaron la misericordia de Dios por última vez”⁶⁶.

¿En quién? En Moisés y Elías. En los Dos Olivos. En el cumplimiento de la Venida del Hijo del Hombre con Sus Ángeles en esa etapa final, que es el cumplimiento de los Dos Olivos.

¡Es sencillo todo!, para aquel que lo entiende, que lo recibe, porque es escogido. El que no: no lo va a recibir ni porque se le muestre… Bueno, van a creer cuando vean los milagros allí sucediendo; pero ya eso no va a haber oportunidad, ya ahí no hay forma para venir para atrás a decir: “Ahora sí creo”.

Va a pasar lo mismo que pasó como en el tiempo que se fue Jesús del Trono de Intercesión: Dios se lleva a la Iglesia, y saca entonces esos ministerios en cierta forma; y cuando mira, ahí entonces ya el juicio; porque ya no están los escogidos, por los cuales Él está protegiendo todavía este mundo.

Ahí se hablaron un montón de cosas… ¡grumf! Pero Dios nos va a seguir ayudando. Dios va a seguir dándonos la fuerza. Y una de las cosas es: cuidándonos; muy especialmente aquí: en la mente; ahí es la batalla más grande: aquí; en donde está ese perro negro y ese perro blanco luchando. A quien más usted alimente, ese es el que va a obtener la victoria. Ese es representando en el perro, ahí en el indio, que él puso ese ejemplo⁶⁷.

O sea que al escogido de Dios, por más lucha que vaya a tener y tenga: Dios le va a dar la victoria; porque está ya profetizada, ya está… Hemos llegado hasta aquí para vencer. No hemos llegado aquí para llegar a la orilla y quedarnos ahí.

¡Si dice que la victoria está asegurada! ¡Si dice que Cristo los vencerá! Pues entonces uno tiene que saber que ese poderoso Ejército, somos parte de ese Ejército, ¡y que somos vencedores desde ya!

Lo que tenemos que hacer es ponernos en las manos de Dios: “Señor, Tú me vas a dar la victoria de esta. Yo voy a salir de esta situación, porque Tú me dijiste que yo soy un vencedor; por lo tanto, me vas a ayudar”.

No me voy a achongar por una esquina: “No, Señor, esto yo no voy a poder salir de aquí”. ¡Por favor! Si nos estás diciendo que eres un vencedor, ¡es porque vas a vencer!

No se puede desanimar uno ¡por nada! Y más ahora, en esta recta final.

Mira, a veces cuando uno iba corriendo para entregarle el basturro al otro, esa recta final era la más rápida (de los que corrieron relevos; yo corrí muchas veces), y uno iba cansado; pero a lo último uno sacaba fuerzas de yo no sé dónde, y echaba recto para darle ese empuje al…

O sea que es cuando a veces uno está más…, bueno, dice allí en “NOMBRES BLASFEMOS”: [WMB] “Cuando parece más débil…”⁶⁸. Y la Iglesia va a estar en un punto en que va a parecer bien débil. Eso se cumple en el mensajero, y también en la Iglesia, y en el individuo.

Cuando parece que ya débil, que casi no puede: ahí Dios lo vindica y corona el ministerio. Nos va a coronar con el cuerpo eterno y glorificado. Cuando ya parece que el diablo la tiene acorralada —a la Iglesia en la apretura— ¡ahí Dios la corona!

Por eso es que es: “El que venciere hasta el fin, este será salvo: este será transformado”⁶⁹.

Que Dios les bendiga, Dios les guarde; y gracias por estar estos ratitos acá.

Creo que también Andrés Cruz tenía actividad en esta semana; me pidió un saludito ahorita. Yo creo que ese saludo puede usarlo Andrés para estos días que va a tener de actividades; y también el hermano Miguel, que tiene actividades; y así en la semana ya ellos pueden escuchar esta plática que hemos tenido aquí; que desde… como a las 4:00 de la mañana yo estaba con algo que quería hablarles, que: “Si así hubiera un momentito para platicar ciertas cosas”.

Y Axel que me llama a las seis y veinti pico, y yo: [JBP] “Pero este muchacho no sabe que es a las 7:00 que pegamos. ¿Qué hace llamándome ahora?”. Y me llama, que tenía que comentarme algo. Y yo le dije: [JBP] “Bueno, vamos pa’ allá”. Acuérdate que son cosas… luego vamos a verlas en la historia. Después llega Blanco, ¿y qué fue lo que le dije a Blanco? Él se iba parece que para la guagua…

[Trabajador (Blanco): Yo iba a parquear la guagua [carro]]

Y yo le dije: “Estate, espérate”. Estaba deseoso de que Axel terminará pa’… [Risas] Pero fue bueno, porque me retuvo. Mira como son las cosas: me retuvo ahí como media hora; pero fue bueno para que así esperara a que los muchachos llegaran. O sea que ¿ven cómo todo tiene…?

Si él no me hubiese llamado, yo me hubiese quedado ahí arriba; y a lo mejor ni… estaba estu-… iba a estudiar para enviarle el saludo a Andrés. Pero de la manera que se habló aquí, yo creo que no iba a ser la forma que iba a hablar allá. Iba a tener más…, iba a ser más comedido, y como más… Hay veces que Dios permite… Pero… pero si es así, no se hablaba de estas cosas.

Como cuando Jesús platicaba con los discípulos, que les decía… Se iban allá, y después le decían los muchachos: “Bueno, Jesús, muéstranos ahora la parábola del trigo y la cizaña. Suelta pa’ acá”. Es que es para los muchachos de Dios, o sea, los escogidos, los que entenderían las parábolas y las profecías y todo, y las recibirían. “No se le puede dar las perlas a los puercos”⁷⁰, sino se les da a los escogidos.

Y es triste saber que muchos no reciben esta Enseñanza. Y ahí se oye feo, pero eso se le…; no es para ellos. Y pasan muchas veces… Un muchacho una vez me dijo:

—“Mira, me dio hasta un dolor tan grande ver que cogió el mensaje; y había los libros de Enseñanza ahí; y la forma… como despreciándolos”.

Y yo:

— [JBP] “No te preocupes, no le hagas caso a eso”.
—“Pero es que me duele, porque es una persona que uno…”.
— [JBP] “Así es”.

Despreciándolo no se lo llevó. Ahí le está dando la espalda a su adopción. Le da la espalda al mismo mensajero; ni por respeto que están sus escritos ahí.

No estamos obligando a nadie a que se lleve el libro; pero nadie puede decir que no se le dio el Alimento y no se le dio la Fe de Rapto; nadie. Porque se le está poniendo por satélite, se le está poniendo por radio, se le está escribiendo, está en audio, está en Telegram, ¡está en todos los medios habidos y por haber! Y no lo quieren…

—“No, yo no me quiero…”.

Y otra que:

—“Yo no me quiero contaminar”.

Mira, esa Palabra le va a retumbar en los oídos y en el cerebro y en el corazón y en los tuétanos, a toda persona que haya expresado esas palabras. Porque “la Palabra es la que discierne las intenciones, los tuétanos, del corazón, y parte todo”⁷¹, dice ahí.

O sea que está diciendo que esa Palabra es un veneno: está blasfemando la Palabra de Dios, y colocándola como algo del diablo, colocándola como algo que le hace daño. Porque lo único que puede hacerle daño al cuerpo, que te puede contaminar: es un veneno o es algo mal.

¡Mira cómo está colocando la Palabra, la Fe de Rapto, el Título de Propiedad: Lo tienen por basura, por…! ¡En eso no hay perdón; pero no hay perdón! ¡Y se merece lo peor esa persona!

¿Tú sabes lo que es que Dios te dé lo que tenía Adán, ¡y tú menospreciarlo!?

No. No, no hay forma de la irreverencia y responsabilidad que tienen ellos como…, ¡y mezquinos con su alma! Porque por lo menos si se quedaran callados… tuvieran una esperanza; pero se ponen a hablar. Se creen que son dioses también, porque…, y se creen lo más grande que hay.

Y Dios cuando ve eso…; eso…; no sé qué va a pasar con esas personas. Algo bueno no les va a pasar.

Y así como también todos los que le hagan mal a uno de mis pequeñitos⁷²: todos esos también tienen que dar cuenta. Todo aquel que arrastre también, y se lleve unos pocos: también.

Las cosas en este tiempo se van a hablar cada vez más claras. Nos va a doler muchas cosas. Eso va a provocar ira (que no crean); pero… Las cosas cada vez se van a hablar más claras. Van a empezar a decir: “’Este’, pero mira cómo habla así”.

Y no va a haber nada que quede oculto en cuanto a la identificación de las personas, de quiénes son cada uno.

Esa predicación de “EL RASTRO DE LA SERPIENTE” ya ha comenzado. Nadie se ha dado cuenta. “El SENDERO DE LA SERPIENTE”, “EL RASTRO DE LA SERPIENTE”, todo eso que iba a predicar el hermano Branham piensan que es en un mensaje.

Todo ha venido surgiendo porque la línea de la serpiente, que es también representada en ese becerro de oro: todo eso está siendo abierto; y siempre termina en seres humanos.

Él destruyó el becerro de oro, lo echó al agua, y después el pueblo se lo bebió⁷³. Será destruido el becerro de oro con el ministerio de Moisés y Elías.

Toda doctrina y toda cosa fuera de la Palabra de Dios será destruida, molida.

Eso yo creo que está escrito; todas esas cositas se van a ir hablando. Y cuando viene a ver: “¡Adiós!, pero si… el hermano William ahí iba a hablar, que iba a predicar sobre el becerro de oro”.

Échate para atrás, que ya todo eso se ha hablado.

El rastro de la serpiente: todo eso se ha hablado.

Exponer nombres: el hermano Branham decía; [WSS] «tendré que exponer nombres»⁷⁴, escribe el hermano William. No quisiera yo hacerlo, pero tengo que hacerlo. Y ya se ha empezado a exponer nombres.

O sea que cuando vienes a ver: se puede estar cumpliendo esa Palabra…; porque no puede caer una palabra en tierra, que ha hablado un profeta. ¡Tiene que ser cumplida!

Y mira dónde se está hablando todo eso: en una Carpa.

Se ha hablado de nombres, se ha hablado de segregación, se ha hablado de trigo, cizaña; se ha hablado hasta que el que está al lado sentado tuyo puede ser una cizaña. Todo eso se ha hablado.

Y la persona, tú ves que se crujen los dientes la gente cuando se identifica. Siempre los que están batallando en contra de la Obra de Dios es porque – se quedan identificados. Y como al diablo no le gusta que sea expuesto, ¡jay!, ahí es que aprovecha; pero aprovecha a atacar para tratar de decir que no, que eso no es así.

Pero Dios nos va a ayudar, Dios nos va a dar la victoria.

Y aprovecho y… (sé que no están todos aquí, pero) todo lo que han hecho este año por la construcción de la Carpa: que Dios les bendiga grandemente, y este próximo año les siga usando también grandemente en favor de la Obra de Dios aquí en Puerto Rico, en todo lo que haya que hacer en favor de la Iglesia como instrumentos de Él, para servirle en toda esa manifestación que va a venir en medio del pueblo de Dios en este tiempo final, en favor de la Iglesia-Novia, de las fatuas y de los 144.000.

Que seamos un pueblo que esté brazo a brazo con el ministerio final, para que Dios cumpla en medio nuestro todas las promesas que Él tiene ya predestinadas para cumplirlas.

Que seamos instrumentos de Él para Su servicio.

Que nos ayude de toda cosa que esté contraria a la Palabra: que quite de nuestros pensamientos, nuestras mentes… Cuando entre algún pensamiento que sea contrario a la Palabra de Dios: que Él la quite de nuestras vidas, y que nos ayude.

Que nos fortalezca cada vez más y más para seguir la Palabra, para seguir al Arca.

Y que nada nos estorbe en este tiempo final para seguir en este gozo, en este avivamiento que Dios nos ha permitido tener; en este avivamiento final para obtener nuestra adopción. Que nada nos estorbe para obtenerla. Que nada nos estorbe para obtener nuestra transformación. Que nada nos estorbe para obtener la Fe de Rapto.

Que, Señor, Tú estés en nuestras vidas siempre, como lo has estado hasta ahora; y nos sigas guiando.

Y que todo lo que hagamos de aquí en adelante sea por Tu guianza, como lo has hecho hasta ahora.

Y que, Padre, Tú también llames pronto a los 144.000: que ellos te vean en medio de la Iglesia obrando.

Y que si este año, Señor, está en Tus planes que todo eso sea cumplido, en donde al hermano Branham Tú le mostraste todos esos milagros y maravillas, entonces, antes que llegue ese momento: ¡Prepáranos! Porque no queremos llegar allí sin estar preparados. Que lo que falte en nuestras vidas, Tú nos ayudes para que logremos esa perfección en estos cuerpos. Porque lograremos ser perfectos en estos cuerpos; porque por eso es que te vamos a ver a Ti obrando. Permítelo, Señor.

Cuida este pequeño Rebaño; y también en cada país, en los diferentes lugares: ¡Cuídalos, Señor!

En Tu Nombre Eterno y glorioso, como Hijo de David, Rey de reyes y Señor de señores, William, en esta Obra de Reclamo. Amén y amén.

¡Amén!

Dios los bendiga grandemente.

El tema, el tema que podemos colocar allí puede ser: “LAS ETAPAS EN EL CUMPLIMIENTO DE LA CARPA”, y ahí reúne todo.

“LAS ETAPAS EN EL CUMPLIMIENTO DE LA CARPA”, o… de la Tercera Etapa se había colocado.

“LAS ETAPAS EN EL CUMPLIMIENTO DE LA CARPA”.

Porque las etapas, todas, en la Visión de la Carpa, son consecutivas y tan rápidas, como ocurrió en esta dispensación, en todos estos años: que las etapas eran consecutivas. Y en esta última fase todo es consecutivo y rapidito.

O sea, la Piedra Angular ahora, todo lo que se conlleva en el Lugar Santísimo es algo que ocurre todo en un solo momento, pero en etapas. Busquen allí cuando él entraba al lugar santísimo y hacía ciertas cosas, pero las hacía en ese momento: diferentes etapas, pero en un mismo momento⁷⁵.

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