Plática con los obreros de La Gran Carpa Catedral “Si no crees, no comprenderás”

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Si no crees, no comprenderás

Rev. José Benjamín Pérez
Jueves, 29 de diciembre de 2022
Cayey, Puerto Rico

… uno dice Judas, y piensan que es [el Iscariote]… No.

¿Quién fue el que se hizo cargo del cuerpo de Moisés? Ahí dice [Judas 1:9]: “Cuando disputaban por el cuerpo de Moisés”: el diablo, Lucifer, y el Arcángel Miguel (que era el que se encargó allá del cuerpo de…).

[Trabajador (Carlos): Fue el que lo subió].

Él fue el que se lo llevó. Porque si el diablo cogía el cuerpo, podía hacer imitación de… usarlo. O sea, lo ponía en un sitio para…

Ya había identificado el diablo allí a Moisés, fíjate.

Pero mira qué cosa. ¡Oye, mira! El diablo identificó allí a Moisés, porque ¿por qué contendía contra el Arcángel por el cuerpo? Ya lo había identificado como el libertador.

Y mira cómo ahora Él se lleva a Moisés, cumpliendo esa parte del ministerio dispensacional, que se cumplió en él también.

Tiene una trayectoria: nace en el 1940 ese mensajero dispensacional; crece, tiene ese ministerio allí en el 63, de ese Ángel (se cumple en él); viene con esa nueva comisión de abrir una nueva dispensación; pero como tiene ahí el cumplimiento de un Arcángel: el Arcángel Gabriel, viene también anunciando las buenas nuevas, tanto del precursor como del precursado.

[Trabajador (Carlos): ¿Y quién guardó ese cuerpo?].

¿Y quién guardó ese cuerpo?

Pero mira, después… Vamos a terminar ahí esa parte de que él le ha venido apareciendo a todos los mensajeros. Él desde antes ha estado…, ese Arcángel ha estado ministrando desde…, desde el Huerto del Edén ha venido ese Ángel en medio de la raza humana.

Pero mira cómo viene y le aparece al hermano Branham (ya se identifica, ya hemos identificado que es él)1, viene y le habla allí en el río Ohio, le habla y le dice que: “Tu Mensaje precursará la Segunda Venida”.

Como allá le apareció también a Zacarías y a Elisabet: que el niño que nacería sería como el precursor viniendo con el espíritu de Elías en su tercera manifestación2.

Acá le aparece a él y le aparece a María también, que es la Iglesia-Novia, representada en la Iglesia-Novia.

Pero viene, empieza su ministerio en ese campo espiritual, como fue allá. Allá no vino en carne humana, pero fue en esa esfera espiritual que les apareció a ellos. Acá le aparece a la Iglesia en su cuerpo terrenal, y viene y le dice todo lo que va a estar ocurriendo durante todo este tiempo; lo mismo que hizo allá con María3.

Pero también tiene el cumplimiento del mensajero dispensacional —porque Dios es el que opera los ministerios— pero en ese campo espiritual.

Sube a la Iglesia en ese rapto allá (de Laodicea, los saca), todo en el campo espiritual; pero cuando eso viene a cumplirse en el campo acá literal, físico: es ahora. Porque dicen:

“No, pues ahora están diciendo que él lo cumplió en el campo espiritual”.

Pues, ¡jaj!, ¿y por qué no estás transformado todavía? Si hubiese sido en el campo literal, pues entonces ya hubieses estado transformado y raptado. Ahora se está cumpliendo eso.

Pero ¿qué pasa? Ya estaban identificando ese velo; y viene Dios y se lo lleva. ¿Y a quién deja a cargo Él de su cuerpo, y que haga todo lo que tenga que hacer?

Por eso es que es tan grande lo que tenemos. Que cuando uno vaya desmenuzando eso bien…

Es lo mismo que pasó con Abraham: allí estaba Elohim con Sus Arcángeles Gabriel y Miguel. Y en este tiempo Dios nos ha dado a conocer todo ese misterio como en los días de Abraham. Ahí dice como en los días de Lot, pero es los días de Abraham, porque estuvieron allí presentes Elohim, Gabriel y Miguel4.

Pero allá el diablo por poco identifica…, o ¡lo identificó! porque después ya que murió estaba… Y le quitó la vista, vamos a decir, en ese tiempo, a lo que estaba Dios haciendo; y Josué pudo hacer el trabajo.

• Aunque había luchas allí en esa – Antes de entrar a la tierra prometida había sus…; porque decían los ancianos: “Si Dios está contigo como estuvo con Moisés, te vamos a seguir; vamos a…”5. Siempre tenían esa… como esa duda, o esa…:

—“Pues vamos a ver. Espérate”.

[Trabajador (Carlos): Ver para creer].

“Bueno, vamos a ver”.

Y se pusieron brazo a brazo con Josué. Pero de seguro muchos dijeron: “No, no, no. Hasta que Moisés no regrese…”.

Aunque les había dicho allí: “Josué pasará el pueblo a la tierra prometida. Tú no lo vas a pasar”6. Pero quizás muchos no creyeron eso, porque se lo dijo a lo mejor otra persona; a lo mejor el mismo Josué le dijo:

—“¡Mira!, me dijeron que yo…”.

(Porque hay que ponerlo así en el común).

“No, a mí no. Hasta que yo no lo escuche de Moisés…”.
“¡Adiós! Moisés se fue. ¿Y ahora? No lo dejó dicho”.

[Trabajador (Elmer): Eso pasa con todo. Ahí, tú, te mandan algo y: “No, hasta que no me lo diga él, no lo voy a hacer (¿entiendes?), no voy a creer”].

Ajá, exacto. Eso es… En las cosas sencillas pasa; en los trabajos.

[Trabajador (Elmer): En los trabajos, es lo que te digo].

“Hasta que no me lo diga Fulano, no lo voy a hacer”.
—“Pero si es que me dijo que te lo dijera”.

[Trabajador (Elmer): Así mismo, así mismo es].

[Trabajador (Carlos): “Que me dé las instrucciones él”].

Y así habrá ocurrido allá en ese tiempo. Josué de seguro:

—“No, él me dijo que hiciera esto”.
“Pero es que yo… ¡¿Dónde está eso?! ¿Lo dejó escrito en piedras, en algún sitio?”.

Pero cuando vieron las obras que estaba haciendo Josué…, ya después, ahí se dieron cuenta que sí era Dios a través de él.

• Pero ya el enemigo, esa parte, ese golpe duro que iba a dar: no lo dio, porque se llevó a Moisés [el Arcángel Miguel]; y aun así, después de muerto trató de coger el cuerpo de Moisés.

Acá ya estaban identificando… el diablo estaba identificando ya quién era nuestro hermano William; y de seguro ya podía estorbar la Obra de Dios en cuanto a lo que él tenía que cumplir.

Porque él no podía cumplir algo que tenía que ser cumplido —ahora más adelante— en el que tuviera los ministerios de Moisés y Elías. Si el diablo llega a identificarlo a él, que él era el instrumento de Dios en este tiempo: podía adelantarse y hacer algo que tenía que hacer después.

Como ¡cuántas veces quisieron matar a Jesús! Pero no era el tiempo para el Sacrificio ser efectuado.

Y ahora el diablo estaba como ya pendiente a que…: “Espérate. Este como que es él. Déjame ver cómo – qué hago por aquí, a ver si lo logro ‘cachar’7. Pero Dios en Su Plan, en Su Programa, no era para permitir que él lo identificara y ya – y ahí lo…; vamos a decir, lo que iban a hacerle con los ministerios de Moisés y Elías. Eso se… Eso no hay forma de escapar de eso… que se va a cumplir.

Pero eso está interesante: lo de quién se hizo cargo del cuerpo de Moisés allá, y quién se hizo cargo del cuerpo acá, de nuestro hermano William. Y ahí uno va identificando ya esos personajes en la forma común.

• Es como cuando yo dije hace poco8: [JBP] “¿Cómo Sara se va a poner a dudar y a reírse, incrédula a eso que dijo ese Personaje que estaba allí?”. Pudo haber dicho: “Imagínate, ¡si ese es Dios en carne!”. Esa revelación Sara no la tenía (parece) clara, porque dudó.

Ahí tú ves, entonces, que el cuerpo que tenían ellos era algo tan… Llegar dos chamacos – tres chamacos allí; todo… con polvo en las… ¿Ve? Algo sencillo. Uno lo lee ahora y sabe que ese es Elohim, y tiene reverencia con esos Personajes que… Allí uno lee: “¡Wow! ¡Elohim allí!”.

Ajá, y si usted hubiese estado allí, ¿hubiese sido representado en Sara o en Abraham? Por la manera en que se revelaron a ellos: fue algo sencillo.

[Trabajador (Carlos): Bueno, eso puede pasar como lo que tú dijiste ahorita: que fuiste a un sitio… y como te bajaste la mascarilla; en el futuro, cuando esa persona vea].

“Verdaderamente, yo lo había visto”.

[Trabajador: “Mira, sí! Yo lo había visto a él”].

[Trabajador (Carlos): Umjú, ajá, así mismo].

Sí. ¿Ve?, que son cosas que Dios va cumpliendo pero en una manera del común. Se esperan… esperan que… ¿Ve? Y se repite lo mismo que allá. Y se repitió en el tiempo del hermano Branham: “No. Tiene que ser él el que viene” (el grupo). Y mira, todavía están esperándolo.

[Trabajador (Carlos): Todavía].

¿Y han pasado cuántos años? Y así mismo el grupo de acá que no ha subido a esa etapa donde estamos ahora: se quedan ahí en los tipos, en las figuras; se repite lo mismo también: se quedan esperando algo que no se va a cumplir de la manera que ellos están esperando.

¡Claro que él va a venir! Hay una parte donde él dice que [WSS] “yo lo veré en la resurrección”, el hermano William. Hace poquito lo leí: [WSS] “Yo lo veré cuando resucite” o “Yo lo veré…; y ahí vamos a platicar”, dice él.

O sea que hay algo bien tremendo ahí, en cuanto a esa parte de las personas no ver el cumplimiento y tener la parte de la Palabra, o sea, que es la letra, pero no la Palabra cumplida. La ven todavía ahí: escrita. Y cuando se está cumpliendo, como la creen de la manera en que ellos están pensando (que es en un personaje): ahí se les escapa la Palabra; y ahí queda la creencia y la fe basada en algo muerto; no en algo vivo. Se quedan, y ahí se inclina a la denominación.

Tan pronto el mensajero se va: se denominacionalizan; ¿por qué? Porque así como el mensajero murió, también su creencia muere, la fe muere; está basada la fe en algo muerto (¡mira qué [tremendo]…!), no en algo vivo.

Dios es un Dios vivo9. Dios no puede basarse… Su fe (en la persona), Dios no la puede basar en algo que está muerto. Tiene que basarla en algo vivo.

• ¿Qué está vivo ahora? El avivamiento que está habiendo ahora. ¡Ese gozo!

Ese último avivamiento, el hermano Branham dice: [WMB] “¿Vendrá otro tiempo?, ¿vendrá otro avivamiento?”10.

Y después dice en otra parte: [WMB] “Será un avivamiento que barrerá el mundo, un Mensaje que barrerá el mundo, que estremecerá el mundo”11.

Y todos se enfocaban en lo que estaba ocurriendo en el tiempo del hermano Branham o en el tiempo del hermano William. Y sí, ¡se cumplió también!, porque las Escrituras tienen múltiples cumplimientos12.

Pero cuando dice: [WMB] “Un Mensaje corto”… mira todo lo que ha hecho este Mensaje… ¡Que es el mismo Mensaje! Porque aquí no hay otro Mensaje; el Mensaje es el que trajo él. Todo lo que ha hecho, ¿en cuánto tiempo?

[Trabajador (Carlos): En un año].

En un año (ponle), todo lo que ha hecho. Ahí se cumple exactamente esa Escritura: [WMB] “Un avivamiento corto”.

No sabemos cuánto falte. Él dice en una parte que [WMB] “el avivamiento dura tres años y después muere”; pero el hermano Branham había dicho que [WMB] “llevamos 15 o 20 años, y no se ha denominacionalizado”13.

O sea que cuando el mensajero está, es difícil que se denominacionalice el pueblo: porque está el mensajero. Por eso él decía: [WMB] “Tres años, y no ha habido una denominación”.

Ahora están diciendo: “Ah, que él se fue, y van tres años…, y eso es una denominación; porque después que él se murió, tres años…”.

¿Qué sabes tú la fecha en donde comienza el avivamiento después que el mensajero se fue?, ¡y más cuando hay una promesa!; porque eso se cumple cuando ya no hay otro mensajero ahí que arranca.

Siempre hay un entrelace entre uno y otro: cuando empieza ese otro avivamiento con ese otro instrumento.

Y los que se quedan son los que están denominacionalizados. El que habla de que el otro es el que está en una denominación, pues es el que está denominacionalizado, porque se está quedando con algo muerto: el Mensaje sigue vivo, pero la fe basada en alguien muerto.

Dios es un Dios de vivos, y Dios obra siempre en personas vivas.

O sea, es algo bien interesante todo eso del avivamiento que está ocurriendo en una escala rápida, grande. Porque estamos basados en la promesa del Séptimo Sello, que es la que trae la Fe de Rapto. No estamos basados en otra cosa, sino en el cumplimiento de eso.

Y para obtener esa Fe, tiene que uno creer. Dice (lo que leí el domingo)14: [WSS] «tienes que creer para entender»; pero si de cantazo15 no vas a creer: no vas a poder entender lo que Dios está haciendo.

Por eso el creyente es creyente siempre. Bueno, creyente ¿eh?; porque siempre cree, recibe lo que Dios… ¿No lo entiende? “Dios me va a abrir el entendimiento de alguna manera”.

[Trabajador (Carlos): Pero le dice: “Amén”].

Pero le dice: “Amén”; y entonces alrededor de eso va obrando Dios y va obrando. Pero si de cantazo le dice: “¡Eso no es así!”, pues entonces ¿cómo vas a…? Deja que todo ocurra.

Y yo busco (yo creo que en el search [buscador, navegador]), yo no sé si ha pasado más de cien de veces que yo hablé: [JBP] “Si no lo entiendes, cállate”. Desde… yo creo que fue el mismo 25 de diciembre, empecé por ahí. ¿Por qué? Porque esa es la clave.

¿Qué sacas tú con decir?: “No creo. Eso es falso. Esto es del demonio. Eso es esto, eso es lo otro”. ¿En qué te beneficia? Raíces de amargura y cosas negativas te crea adentro. ¡Espera! ¡Quédate calladito!

Y al final, si no era, pues tú: “¡Mira!, ¿ve? Yo tenía razón”; pero si era: “Uy, gracias a Dios yo no hablé”. ¿Ve?, que son dos cosas…

Como le dijo a… le dijo a ¿quién fue? ¿A Nicodemo? O Gamaliel:

“Mira, salió Teudas y un tal Judas (Teudas, en ese tiempo), con un movimiento: mucha gente lo siguieron, después se desvaneció. Si eso no es de Dios (hablando de los discípulos, que estaban en esos días con ese avivamiento de…), si eso no es de Dios, se va a desvanecer; pero si es de Dios, no vaya a ser que estén luchando ustedes en contra de Dios” [Hechos 5:34-39].

¿Qué les estaba diciendo allí? “¡Cállense la boca! ¡Esperen! Si no es de Dios: eso se va a ir. Déjalo”. Pero si es de Dios… ¡ayayay!

Meterse con un Dios que esté cumpliendo Su Programa…

• Es como uno: usted está construyendo un sitio; que se meta alguien a tratar de…: el arquitecto y el ingeniero se pone bravo: “Sácame ese de aquí, que lo que trae es discordia a los trabajadores”. Pero es algo que…

Dios entonces manda en ese tiempo final a esos Ángeles segadores, para entonces separar, recoger el trigo. Esa pesca de los 153 es bien importante16; lo que deseó el hermano Branham pescar; lo que el hermano William también.

Él recogió todo, pero el tiempo de arrancar la cizaña no fue en ese tiempo; por eso él los dejaba cerquita a todos. Incluso a mí muchas veces me decía: [WSS] “Tenlos cerquita. Regálale una cosita a este, al otro; mantenlo cerca, mantenlos ahí al ladito”. ¿Ve?

¿No estaba Judas cerca de Jesús todo el tiempo? Pero llegó un momento en donde Jesús le dijo: “Lo que tengas que hacer, hazlo”17. Ya no lo tenía cerquita. Ya llegó un punto en donde lo que iba a hacer, Él no lo estaba mirando… ¡Dios lo estaba viendo, Él sabe todas las cosas!, pero no lo tenía cerca para ver lo que estaba haciendo.

Y acá Él los ha tenido a todos cerquita; pero ¿no te has fijado que ha llegado un momento en donde se han empezado a alejar? Y ya es un poco difícil uno darles sus cositas, y: “Vente por aquí. Dale una llamadita, dale esto…”.

Porque él me decía: [WSS] “Mantenlos cerca; porque si no, te pueden hacer mucho daño”. Pero eso se cumple hasta cierto tiempo.

Ahora, ¿cómo tú los va a…? Si no, para empezar, no creen en eso; pues ahí se cumple esa parte: donde están por allá pensando y diciendo cosas quizás en su mente, en su corazón, en contra del Programa Divino. Viene a cumplirse eso también.

Ya queda entonces Jesús solo con Sus discípulos; y entonces es que ahí toman la cena. Porque la cena no la cogió Judas18.

• Y ahora la Cena la está tomando…, ese alimento espiritual lo está tomando es: los escogidos que van a hacer el rapto.

Los demás, aunque estén sentados ahí, como no lo creen: no están comiendo ese Alimento que los prepara para recibir la Fe de Rapto y la adopción; como los preparó el alimento que Él les dio allí para el Día de Pentecostés recibir el bautismo del Espíritu Santo. Pero no estaba Judas allí.

Y ahora, aunque hay gente todavía dentro, allí sentada…; pero no están recibiendo lo que el escogido de Dios le dice “¡Amén!” a cada palabra.

Porque esos son los que están preparándose para ese tiempo de adopción, ese tiempo de la Fe de Rapto, y esos diitas en donde, cuando venga la apretura fuerte, y venga todo lo que vaya a venir, y la depresión grande y todo: tienen las herramientas —ellos— para ser como un Adán, para ser como un Jesús; para ser como un Josué mismo, que dijo… ¡Él no oró!: “¡Sol, detente! ¡Luna, también detente!”19, porque hubo una necesidad allí.

Y si paró el sol y paró la luna, ¿no va uno ahora con esa Palabra…?

¿Qué tenía Josué allí? Todo lo que Moisés les había dejado.

¿Y qué estaba allí mostrando Josué? Que creyó toda la Palabra que le había dejado Moisés, o que le había dicho Moisés en ese tiempo.

Y en ese tiempo de apretura, la preparación de ahora la vamos a ver: que sí valió la pena estar agarrado hasta el final de todo eso, porque vamos a tener los elementos en nosotros para hablar la Palabra.

Y como la Fe está basada en el cumplimiento del Séptimo Sello, que es la Venida del Hijo del Hombre con Sus Ángeles, y esa persona la cree, ¿qué tiene ella (esa persona) en su corazón? El Título de Propiedad.

Al tener el Título de Propiedad: ¡nada le es imposible! Son pequeños mesías en la Tierra20, un Ejército grande que Dios tendrá en la Tierra antes que vengan los refuerzos.

Antes que vengan los de la sexta dimensión, va a tener ya acá Su Ejército también, con ese poder que tuvo Adán, el hermano Branham en esas cinco manifestaciones, Jesús; o sea que son profetas. Por eso es que él dice: “Ojalá y todo el pueblo sea profeta”21.

Y acá muchos diciendo: “No queremos eso. No…”.

¿Cómo estás menospreciando lo que Dios quiere para el pueblo?, ¡si lo que Dios quiere es que tú seas como Él! Y lo que se está dando es algo que va a producir eso. Pero como no entienden que Dios siempre brega por medio de un velo de carne, ahí es que tropiezan. Ven la promesa tan grande, pero el cumplimiento para llegar allá y las herramientas que se están dando para llegar a esa promesa: no la pueden recibir.

• Tú puedes estar en un supermercado o en una ferretería, y te hace falta una lámpara para terminar tu proyecto; pero el que está cobrándote allí:

“No, voy a esperar a que llegue otro que me cobre, porque este, no me llevo con él”.

Pero necesitas la lámpara para que de allá te den el último cheque de la construcción…; te van a dar, a lo mejor, un reconocimiento, porque en la construcción es algo que nunca has hecho…

Llegaron las 5:00 de la tarde, la hora de cerrar: te quedaste con la lamparita, que aparentemente sabes que prende, que tiene luz…:

“Mira que… Bueno, salgan todos, porque cerró la tienda”.

Y te fuiste con las manos vacías.

Tenías el tipo (vamos a decir) de la luz, porque sabías que tenías la lámpara; pero por no pasar por la caja y pagarle allí al que estaba allí, porque no te llevabas con él: no te la llevaste. Terminaste luego saliendo en oscuridad. No llegaste a la realidad; consciente de que esa luz, al llevarla y ponerla, iba a prender; pero como no te gustó el que te iba a cobrar…

Son diferentes ejemplos que uno puede hablar.

¿Ve? Tienen el Mensaje. Saben que ahí está la Fe de Rapto. Saben que ahí tienen que ser hablados los Truenos en este tiempo. Pero tienen que ver primero al que ellos están esperando, que se fue, y: “No, él tiene que venir y tiene que darme eso. Yo tengo el Mensaje”.

Va a venir el rapto, se va a cerrar la Puerta del rapto, y se van a quedar con el Mensaje. Esa Luz no les va a alumbrar para ver eso que dijo allí: [WMB] “Hay un hombre que puede encender la Luz”22, [WMB] “Cuando esa apretura venga, no te asustes. Hay una Luz que viene que se llevará a Su Novia”23. No van a ser parte de esos que se va a llevar ese que encendió la Luz.

O sea que terminan con el Mensaje, solamente con la Palabra. ¿Y de qué te vale tener la Palabra en letra, escrita, y creer en algo, si no crees la promesa por medio de la cual Dios te la está dando?

Para creer y obtener el cuerpo teofánico se requirió creer en la Primera Venida del Señor: un hombre; y tenías que pasar por esa Puerta.

Para creer y obtener el cuerpo glorificado: se requiere creer en el Séptimo Sello y Su cumplimiento.

Si crees una parte (como decimos acá): “No te vistas que no vas”. Tienes que creer todo el cumplimiento del Séptimo Sello, que es la Venida del Hijo del Hombre con Sus Ángeles; y ahí es que está el misterio tan encerrado que nadie se esperaba que iba a ser de esa manera.

Podían decir: “‘Ese’ está imitando, ‘ese’ está…”; pero se van a dar cuenta (ya mismito) en realidad Quién es el que está: que no es el velo de carne: es Dios el que está obrando en medio de Su pueblo.

Pero no puede Él hacer maravillas y milagros antes, porque entonces ¡así cualquiera va a creer!

Que él se pare a predicar los Sellos (vamos a decir), la apertura de los Sellos nuevamente, trayendo la Fe de Rapto ahí. Creen hasta… bueno. Y lo otro: no es escritural. Porque la Tercera Etapa no va a ser y no es un espectáculo público24.

Es algo sencillo que aun: ahora mira dónde se está cumpliendo eso también. Que Dios encerró y guardó ese misterio; y la manera en que lo está dando a conocer es algo encerrado, que nadie sabe Quién está obrando ahí detrás.

El abrir la Palabra, que es lo más importante, Dios lo está ocultando en un cuartito de madera: y en ese caso es un cuerpo terrenal; porque la madera significa ‘humanidad’.

O sea, Dios está encerrando ese misterio dentro de un velo de carne. Nadie se está dando cuenta Quién está obrando, trayendo esa Palabra.

Cuando vaya a venir el cumplimiento de los milagros: ¡tampoco se va a hacer un espectáculo público! Van a decir ahora que él tiene que pararse allí; él en su cuerpo glorificado, adoptado. Dicen:

“No, es que tiene que ser – él va a ser adoptado, y por eso es que nos va a estar predicando”.

Porque tú les lees: “Habrá predicación”.

“Ah, sí; eso es él en su cuerpo…”.

Eso no es escritural. No se puede aparecer él allí haciendo y cumpliendo eso.

¿No les abrió las Escrituras Él a los caminantes de Emaús? Y estaban con Él, ¡si era Él mismo!25. Así va a ser más adelante a los escogidos cuando ya todo esté…: “Pues yo sabía que era Él el que estaba detrás de ese velo”.

Siempre ha sido Él, porque es Su Mensaje. Nunca ha sido otra persona. Siempre ha sido el Mensaje que ha traído él.

El cumplimiento de lo que Él prometió. Todo se está cumpliendo al pie de la letra, pero en otro velo de carne. Es sencillo. Tropiezan es en el velo de carne. Como siempre ha sido así en todos los tiempos.

El tiempo donde más tristeza y más (vamos a decir) desilusión hay es en este tiempo; porque personas que uno pensaba que iban a comprender eso…; para que veas que ahí no es del que quiere ni del que corre26.

Y tú ves niños ahora: entienden más que los mismos (algunos), que los mismos ministros, y ya saben identificar todo bien. Ellos no tienen ese problema de… Jóvenes, también adultos. Muchos que me han dicho: “Mira, yo que… a mí me echaban pa’ un lado, y mira ahora. Tal pastor, que era más ‘desto’27 que yo, no cree; y yo sí”.

Eso es algo grande para mí. Vean, valoran, aprecian: “¡Cómo Dios me abrió el entendimiento!”.

Otros: “Pero es que yo no puedo verlo, yo no…”.

Es porque a ti…: no has sido predestinado para que lo veas. Y si no lo vas a ver, pues entonces quédate callado; porque para uno de los dos vas. Mejor que seas de los que sean de ayuda para la Novia, y no que sea uno de los incrédulos y de tropiezo; porque ya esa sección está escrita en el Libro de la Vida, y puede ser borrado. Ahí es donde entra el peligro y corre riesgo la persona: de que su nombre sea borrado.

Y ya si es borrado, ¿de qué le valió entonces venir a este planeta Tierra? Hay una parte que dice: “Hubiese sido mejor que no hubiese nacido”28. ¿De qué le valió? Y ahí es donde viene la tristeza para nosotros: personas que uno conoce desde años, y que se pierdan. Y otras que después las veremos, pero eso será después del Milenio: en la resurrección final, ahí si salen bien, pues…; depende cómo Dios le ha visto el…, cómo van a salir en ese Juicio.

• Y este año van a venir años de mucha alegría también y muchas cosas…, pero también año de mucha tristeza; porque además de lo que ha venido ocurriendo, van a venir también ya cosas cada vez, gradualmente, físicas: de personas que estaban bien…

Porque ahora han partido personas con alguna situación, por algo, y Dios cumpliendo también ese número que hay allí, que tiene que ser completado. No puede Él aparecer allí para hacer el juicio allí si no están todos los que van a resucitar; tiene que aparecer cuando estén todos allí.

Y como el juicio empieza por la Casa de Dios29, y la Casa de Dios es Su Templo, pues es lo que está pasando ahora, que es repitiéndose esos días de Ananías y Safira nuevamente30.

Y dirán: “Cuando llegue ese tiempo”. Ya ese tiempo está, ya esos días de Ananías y Safira están ocurriendo; pero ya van a empezar después, más adelante, a cumplirse muertes físicas, de la nada. Como pasó con Ananías y Safira: ellos no tenían ninguna situación allí [enfermedad previa], y cayeron. Y así van a empezar a pasar cosas.

Porque ese temor que dice allí: “Y entró un gran temor en la Iglesia”31 (algo así), cuando ocurrió eso, porque son eventos que no se esperaba la Iglesia.

Puede morir alguien:

“¿Y qué tenía?”.
“Sí, es que él padecía de tal cosa; y lo llevaron; y mira, no…”.

¿Ve? Pero cuando ocurre algo que sabes que la persona estaba bien y de momento se fue; y cuando buscan y chequean: “Es que no se sabe de qué”. Ahí: “Espérate…”. Y después uno saber quién era… Porque puede partir alguien creyente para que se complete ese número; pero también tiene que haber algo que se vaya cumpliendo —de personas— para poder entrar ese temor en la Iglesia y darse cuenta…: “Míralo”.

Cuando parte alguien así, que tenía algo, pues uno…: “Ya estaba…”, ¿verdad? Pero cuando parte de otra forma, ahí se mueve… rápido uno: “Oye, ‘espérate’. Eso parece que es algo igual a…”; porque todo eso vamos a estar sintiéndolo. Y tú ves que parte aquel y: “¡Um! ‘Espérate’, ya hay algo aquí”.

Y todo eso se va a estar hablando. No sabemos si es desde el púlpito o desde la oficina. Porque Pedro dijo: “Caerás aquí”, y a la otra le dijo: “Así mismo como se llevaron el cuerpo [de tu marido], así mismo tú…”. ¿Ve? Tuvo que hablar la Palabra. Habló juicio allí, y murió; porque como todo es por Palabra hablada…

Y todo eso… Mira, esa persona que él puso allí32, va a morir por una situación; y ya cuando pase eso, ahí vamos a conocer el por qué. Y hoy doy testimonio de que eso va a ser así.

[Trabajador (Carlos): Amén].

Y ya ahí, pues uno va a mirar y dice: “¡Ea! ‘Espérate’, ya aquí hay algo…”, porque está escrito, y con su puño y letra. O sea que ya cuando eso ocurra, ya ahí hay algo que se va a estar moviendo. Eso para mí va a ser una señal bien grande.

Y la cosa es que yo, este año, yo no me acuerdo si fue en octubre, por ahí… octubre o finales de septiembre; posiblemente fue cuando… Yo creo que fue septiembre 10. Después de ese fin de semana, yo hablé, y lo dije ahí: [JBP] “Señor, de esto, que muera ya para que se vayan cumpliendo las Escrituras”. Y si eso fue hablado, y eso Dios lo toma en cuenta como que se habló, ¡pues ya se habló! Eso fue por septiembre por ahí. Y este año posiblemente eso se cumpla.

Porque el pueblo tiene que ya estar enfocado y tener todas las energías en la preparación. Todavía estamos ahora como los nenes chiquitos: al “toma y dame”.

“Te di”.

Y tú ves que el otro responde con otro: “Te di”. —“No. Te di”. “Te di”, “te di”, “te di”: el “toma y dame”. Parecemos nenes chiquitos: el “toma y dame”.

Cuando cada vez vamos madurando, el Sol nos va madurando, y ya todo eso de juegos de niños, juegos de manos que… Ya se va madurando, y ya eso hay que irlo dejando. No perder el tiempo, las energías, en eso. Si quieren seguir, pues que sigan; que Dios tenga misericordia de ellos; y uno seguir. Pero ese “toma y dame” hay que dejarlo ya; hay que enfocarse ya en las promesas.

¿No pasó en…? Fíjate que siempre que hay algo que sucede, un desastre o algo, una calamidad, el pueblo se une. ¿No pasó en [el huracán] María?, que mucha gente:

“Mira, ¿sabes qué? Yo no me hablaba con Fulano, y ahí mira…, me trajo tal cosa, y me habló, y…”.

Siempre en situaciones así difíciles el pueblo se une.

Y cuando se vayan personas que uno ama, esas situaciones así… ¡más todavía!, va a empezar entonces a despertar ese… “¡Ea rayos! ‘Pérate’, ¿qué tenemos al frente?”.

Hay una parte que dice: “Pasó eso, y entonces el pueblo andaba más derechito”33. Ya es: “Déjame yo quedarme quieto, no vaya a ser que me pase lo mismo”.

O sea, que Dios siempre advierte. Y hay un tema que él dijo: [WMB] “Advertencia antes del juicio”34.

Ellos [los profetas] vienen con la bendición, pero también vienen con juicio. Y como uno decía: “¡Pero que me muestre para creer! Que…, ¡dale, que me muestre! ¡Que me muestre si él dijo que iba a hacer obras mayores! ¿Dónde están las obras mayores?”. Las están viendo en la cara cada día que se predica, pero lo que quieren ver es milagros físicos; seguidores de señales y de cosas.

Después las van a ver, pero las van a ver ya muy tarde. Tiene que ser primero esta etapa; no puede brincar. Después que van a ver: “Ay, verdaderamente estaba él allí”.

— [WSS] “Y yo lo dejé – le dejé todo. Todo ese trabajo que hice se lo dejé para que se los compartiera a ustedes… Y les saque las grabacioncitas (porque todo está siendo grabado)”.
—“Mira, lo que me viene a mí…”.
— [WSS] “Dándole la espalda a esto me estabas dando la espalda a mí. Mira por aquí: Cuando te dieron esto, lo menospreciaste; y en tu corazón dijiste esto y esto y esto. Mira, él vino, te llamó, te buscó, te hizo esto, te buscó la vuelta; y le diste la espalda. Me estabas dando la espalda a mí”.

Así es que dirá. Y derechito para la gran tribulación; porque no pueden ir a otro sitio: o vas pa’l rapto o te quedas en la Tierra. Aquí no hay un término medio.

• Y si uno busca por las Escrituras y las promesas, lo que tienes que ver es… lo mismo que hizo Pedro allí, cuando Jesús le dijo esa palabra fuerte, que el hermano Branham dice: [WMB] “¿Entonces me quieres decir a mí que Él dijo eso a propósito?”. “Sí señor. Para que se fueran todos esos vividores y toda esa gente que seguían a Jesús por señales y porque les daba comida”35.

Y quedó solo con los discípulos: “Y qué, ¿ustedes también se van a ir?”36. Estaba bravito allí Jesús. Y Pedro: “Yo sé que mi…”. Pedro de seguro dijo: “‘Espérate’. Allá aquel, ese no tiene nada; aquel no tiene nada tampoco”. Le dijo a Jesús: “Pero ¿a quién iremos? No entendemos muchas cosas, pero Tú tienes Palabras de vida eterna. Tú eres el único que estás trayendo la promesa que Isaías habló, que Jeremías habló, que Malaquías habló”37.

O sea, él ahí se identificó como un creyente; que aunque no entendía muchas cosas que Jesús estaba hablando, pero: “Bueno, este es el Único que nos va a llevar”. Y ahora, Tú…: “¿A quién iremos?”.

[Trabajador (Carlos): ¿A quién iremos?].

¿A quién iremos?

“Ah, no. Que eso no es”.

Pues, ¿a quién iremos?”.

“No; hay que esperar”.

¿Esperar qué? Estás esperando en el sitio del autobús cuando está ya Dios por lanzar el cohete al aire; estás fuera de estación.

[Trabajador (Carlos): Y el autobús con la puerta abierta y no la ven].

Y está ahí esperando:

—“¡Vente, entra, siéntate a la Mesa!”.
“No”.

No son para sentarse con Él en Su Mesa.

Pero el escogido, claro, va a decir: “¿A quién iremos? Solamente Tú tienes Palabra. ¡Eso que yo estoy escuchando no lo había visto de esa manera!”; ¡pues algo hay!

Y no crean que muchos de los que no están con nosotros no cogen su libro por la noche.

Se le pasará el videíto cuando está… se vayan a ver mirando, pa’ después decirle a la congregación de las cosas. Lo mismo que pasó en ese tiempo empezando el hermano William; y escuchaban para después ellos venir y predicar diciendo que era de ellos. ¡Claro que están hojeando!, y saben que hay algo ahí; pero no les gusta la manera en que Dios lo está trayendo:

“No, no me gusta ese personaje”.

• Pero todas esas cositas. Lo de…, eso de…, al principio, que hablamos del que se hizo cargo del cuerpo de Moisés: es bien importante; porque ya uno va engranando el cuadro y va identificando los personajes, y va viendo Quién Dios está usando y que está ocurriendo en medio de la Iglesia.

Y como los días son los mismos días de Lot y de Sodoma, tienen que haber los mismos personajes que hubo allí: Elohim, Gabriel y Miguel; no puede haber otro escenario que ese.

Venía la destrucción, pero también venía la promesa de un hijo prometido allí. Y el Hijo prometido ahora en la Iglesia es el cumplimiento de la Segunda Venida del Señor en Su etapa con los Ángeles. Es que todo es tan…

¡Todo está ahí!, pero si no lo crees, volvemos a lo mismo: si no crees, no entenderás.

Así es que algo dice él: [WSS] «Si no crees: no podrás entender», algo así dice. Yo creo que yo lo tengo en la… en una foto.

O sea que si no vas a… Si no crees, no vas a poder entender y comprender, no vas a dejar que Dios te abra el entendimiento de las Escrituras. Lo primero es creer.

Eso está bueno ponerle: “Si no crees…”. Yo no sé si yo lo tengo en la foto. Yo le había tirado una foto a esa libreta, que él escribió esa parte ahí de… Yo creo que lo tengo en este otro.

Tiene que haber siempre una base para que la fe sea basada en eso.

Yo no sé, eso… Míralo aquí (mira qué rápido):

[WSS] «Si no crees: no comprenderás».

Ese [título] le vamos a poner a la plática de hoy: “SI NO CREES: NO COMPRENDERÁS”, fue lo que él escribió allí en la libreta.

[Trabajador: Está bueno].

¿Hoy es qué? Jueves, 29 de diciembre de este año 2022.

(Si no llegas a sacar el celular…). [Risas]

[Trabajador (Carlos): Ahora no sé qué hacer].

Hablamos par de cosas ahí…


1 Estudio Bíblico #264, 2022/dic/16 (viernes), pág. 33 del (f), pág. 33 del (T3)

2 San Lucas 1:5-25

3 San Lucas 1:26-38

4 Génesis 18:1-33

5 Josué 1:16-17

6 Deuteronomio 31:1-8

7 cachar (del verbo to catch en inglés): agarrar, coger, capturar

8 Estudio “La nueva comisión”, 2022/dic/24 (sábado), págs. 12-15 del (f), págs. 108-111 del (T4)

9 Jeremías 10:10

10 Citas, pág. 166, párr. 1485

11 Citas, pág. 7, párr. 59 / Estudio “En la 3ra Etapa: Tuvieron que reconocerlo”, 2022/nov/17 (jueves), pág. 64-66 del (f), pág. 74-76 del (T3)/ Estudio “Conocer la Palabra por revelación”, 2022/dic/03 (sábado), pág. 31-33 del (f), pág. 79-81 del (T1)

12 Estudio Bíblico #233, 2022/ago/28-1 (domingo), pág. 29 del (f), pág. 167 del (T3)

13 Citas, pág. 167, párr. 1488 / Estudio Bíblico #256, 2022/nov/18 (viernes), pág. 21-22 del (f), pág. 101-102 del (T3)

14 Estudio Bíblico #267, 2022/dic/25 (domingo), pág. 17 del (f), pág. 143 del (T4)

15 de cantazo: de golpe, inmediatamente

16 San Juan 21:2-11

17 San Juan 13:27

18 San Juan 13:30

19 Josué 10:12-13

20 SPN63-0825E “La fe perfecta”, pág. 24, párr. 155 / Estudio Bíblico #201, 2022/may/08 (domingo), págs. 22 del (f), pág. 108 del (T1)

21 Números 11:29

22 SPN63-1229M “Hay un hombre aquí que puede encender la Luz”, pág. 49, párrs. 265-269 / Estudio “La Tercera Etapa y nuestra preparación”, 2022/may/07 (sábado), pág. 14 del (f), pág. 80 del (T1)

23 Citas, pág. 119, párr. 1054

24 Citas, pág. 10, párr. 87

25 San Lucas 24:13-32

26 Romanos 9:16

27 desto (PR): expresión que se usa para reemplazar cualquier otra palabra que sea más acertada pero que en el momento no se sabe precisar.

28 Mt. 18:6; Mr. 9:42; Lc. 17:1-2

29 1 Pedro 4:17

30 Hechos 5:1-11

31 Hechos 5:11

32 Estudio Bíblico #203, 2022/may/15 (domingo), págs. 13-15 del (f), págs. 15-17 del (T2)

33 Estudio Bíblico #193, 2022/abr/10 (domingo), pág. 20 del (f), pág. 164 del (T) / 1976-12-26 “Dios juzga el corazón”: [WSS] Ahora, vea que esto llenó de tristeza al pueblo, pero los llenó ¿de qué, también? De temor, temor reverencial. Vieron la autoridad que había allí, vieron el liderato de Dios a través de un hombre; vieron las bendiciones de Dios, pero también vieron el juicio de Dios; y todo el mundo entonces comenzó a caminar ¿cómo? Más derecho. Y eso es una bendición.

34 SPN63-0724 “Dios no llama a un hombre a juicio sin primero advertirle”, págs. 6, párrs. 29-31

35 Estudio “El camino provisto por Dios para entrar a la tierra prometida”, 2022/jul/27 (miércoles), págs. 33-37 del (f), págs. 161-165 del (T3) / Estudio “Un Mensaje de separación”, 2022/ago/06 (sábado), págs. 30-32 del (f), págs. 98-100 del (T1)

36 San Juan 6:67

37 San Juan 6:68

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