Saludo a los hermanos reunidos en Chile

Muy buenos días a todos los hermanos que están conectados por Zoom, reunidos en Chile, de diferentes lugares y también de otros países, hoy miércoles, 25 de enero de este año 2023, junto al reverendo Patricio Lara y demás ministros, hermanos y hermanas.

Es realmente una bendición poder saludarles así tempranito, y pedirle al Señor Sus bendiciones sobre todos ustedes.

Estamos viviendo en un tiempo muy pero que muy glorioso, el tiempo en donde se está cumpliendo lo que fue hablado por el reverendo William Branham y por nuestro precioso hermano William Soto Santiago, el cual es el tiempo de preparación para la adopción, el tiempo en donde Dios está cumpliendo Su Palabra, Su promesa, de que nos estaría dando la Fe de Rapto.

Por lo tanto, es el tiempo más grande y más glorioso de todos los tiempos.

Y sin esa preparación, sin el cumplimiento de la Visión de la Carpa, no hay adopción de Sus hijos, no hay resurrección y no hay transformación. Todo depende de esta etapa.

Porque la Fe de Rapto es la que necesitamos para obtener esas promesas; y los muertos en Cristo no pueden resucitar tampoco.

O sea que ellos están esperando también que se cumpla esta etapa, en la parte que nos corresponde a nosotros los que estamos vivos, para entonces ellos ser perfeccionados y volver a la Tierra, tomar cuerpos y ser transformados también en cuerpos eternos y glorificados.

O sea, venir una transformación a los que van a resucitar; porque no van a resucitar en sus cuerpos que ellos tenían mientras estaban en este planeta Tierra. O sea que vendrán también a ser transformados; porque ellos, al ser resucitados, no es que van a resucitar en esos cuerpos que ellos tuvieron, sino que tendrán ese cuerpo eterno y glorificado que Dios prometió para todos los creyentes en Él, tanto los que han partido, como los que están vivos en este tiempo final.

Y le damos gracias a Dios también, porque nos permite todas estas tecnologías que están a nuestra disposición para usarlas en favor de la Obra, y que sean de bendición para los escogidos de Dios; como lo es esta forma así de Zoom, que usan ahí en Chile; y muchos lugares están usando esta manera también, para reunirse y estar escuchando y viendo toda esta Enseñanza bajo Carpa, lo cual es lo que nos está preparando para esos eventos, y así poder estar preparados para nuestra adopción.

La forma que usan también en otros lugares es en los hogares, donde se reúnen en cierta hora y también escuchan toda esta Enseñanza, y la leen cuando está escrita; y también por medio de actividades que se hacen en los diferentes países.

O sea que se utiliza en diferentes formas, estos momentos de compañerismo para estudiar todo lo que nos está siendo dado por el Señor en esta Enseñanza bajo Carpa.

Y así no tenemos que estar haciendo estudios (como decía nuestro hermano Miguel el domingo), preparando, buscando extractos aquí y allá, y preparando estudios para dárselo a la congregación, sino que ya eso está siendo dado desde el lugar donde ya Dios dijo que se estaría haciendo.

Esa parte de los Estudios ya Dios la tenía en Su Programa.

Cualquiera podría decir: “No, ya yo desde hace años, yo estoy haciendo eso”, o: “Ya yo hace tiempo estoy diciéndole al pueblo tal cosa”, o: “Ya yo hace tiempo estoy diciendo eso; eso no es nada nuevo”; pues mire, se está poniendo como Teudas y Judas, que salieron adelante y se llevaron mucho pueblo, y se desvaneció.

Porque siempre el enemigo de Dios hace eso, siempre trata de irse adelante para interponerse en el Programa Divino, para que cuando venga lo correcto digan: “Eso lo mismo que hizo Fulano de Tal”; o sea que se está colocando en la posición de Teudas y Judas, en la posición de un instrumento del diablo.

Y no debemos hacer eso; sino que, más bien, debemos estar siguiendo a lo verdadero. Si hay un dólar falso, en algún lugar tiene que estar uno verdadero.

Y los estudios que preparan así para escuchar, no es que están preparando estudios; porque muchos quizás están interpretando mal la forma de que no se pueden tener estudios. Pero cuando se dice que “no se pueden tener estudios”, no se refiere a estas reuniones que se hacen así para escuchar los Estudios Bíblicos que están siendo dados; sino más bien se refiere a estar tratando de formar esta misma labor; y, para colmo, irse en contra; usar estudios para combatir el Programa Divino.

Eso era a lo que se refería nuestro hermano Miguel. Y quizás algunos extractos que leímos el domingo también, se refiere a todo eso que el enemigo de Dios siempre trata de hacer: hacer algo que se parezca a lo verdadero. Y eso lo que hace es que confunde al pueblo, y también lo desvía de recibir las bendiciones de Dios.

Pero estas reuniones así, que se hacen tanto en vivo (yendo a las congregaciones y también a los hogares) y también por WhatsApp y por Zoom, y todos estos medios en donde se conectan para escuchar y leer estos Estudios Bíblicos que se están dando desde La Gran Carpa Catedral, pues son de gran bendición, porque ya están hechos; y eso es lo que nos prepara para nuestra adopción.

Y tampoco se están poniendo a preparar así estudios de extractos y todo, para combatir; más bien lo que hacen es repasar lo que fue dado ya.

Así que, no queremos decir con eso que no pueden buscar extractos para abundar de ciertos temas, porque todo eso nos ayuda para el crecimiento espiritual; pero ponerse a buscar extractos para combatir lo que Dios está haciendo, y tratando de desviar al pueblo de lo que Dios está haciendo en este tiempo, eso no está bien.

Pero conseguir extractos que hablen de diferentes temas y que nos refuerzan más en todos estos temas, pues ¡claro que sí!, que eso es muy pero que muy bueno.

Así que yo les felicito por sacar siempre tiempo para tener estos estudios así por Zoom, que cuando uno dice: “Tener estos estudios por Zoom”, no es que estén haciendo estudios, sino que están estudiando de los Estudios; o sea, están escuchando y repasando la Enseñanza bajo Carpa.

Yo les felicito a todos. Y también les felicito de que pronto tendrán la visita de nuestro hermano Miguel Bermúdez Marín allá en su país, en Chile; lo cual va a ser de gran bendición, como siempre ha sido, la visita del apóstol Miguel Bermúdez Marín; que tengan buen compañerismo los unos con los otros, como siempre lo han tenido; y que sea un éxito su visita (la visita de nuestro hermano Miguel) allá a su país.

Las reuniones que siempre él tiene (que yo creo que allá me dijeron que va a ser un sábado, o sea, cae sábado) es bueno que todos estén; como en todos los países que nuestro hermano Miguel vaya, también es bueno que vayan; porque esas reuniones, además de escuchar todo lo que Dios nos dé a través de él, y también escuchar los Estudios Bíblicos desde La Gran Carpa Catedral, que se estarán dando, también nos da la oportunidad de tener compañerismo los unos a los otros, como lo tuvieron allí en el aposento alto antes del Día de Pentecostés^[1]. O sea, siempre es bueno tener compañerismo los unos a los otros.

Así que, que Dios les bendiga, y sea una gran bendición la presencia del misionero Miguel Bermúdez Marín allá en Chile, en estos días próximos que están por delante, en donde está incluido Chile en esta visita que nuestro hermano Miguel tendrá.

Bien. Gracias por esta oportunidad que me permiten. No quería quitarles el tiempito que ustedes tienen ya en las mañanas para repasar todos estos Estudios que han sido dados, sino que solamente estoy dándoles estas palabritas que deseaba darles a todos ustedes reunidos allí en Chile y demás países que están conectados a través de Zoom.

Que Dios les bendiga, Dios les guarde.

Dios te bendiga, Patricio. Gracias por esta oportunidad que me permites también de saludarte por aquí; y a todos los hermanos y hermanas, ministros, compañeros en el ministerio; y hermanos y hermanas compañeros del Cuerpo Místico de creyentes de este tiempo final, de la Edad de Oro, la Edad de la Piedra Angular.

¡Y adelante!, ¡agarrados de la Palabra, del Arca!, la cual nos está preparando para nuestra adopción.

Que Dios les bendiga, que Dios les guarde, y continúen pasando un día lleno de grandes bendiciones de parte de nuestro Padre celestial.

Dios les bendiga grandemente.

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^[1] Hechos 1:13-14, 2:1